Orizaba.- La esposa del finado de la empresa Proquina se negó a denunciar a la empresa por la muerte de su esposo al explotar el departamento de secado donde laboraba, aún cuando al día de ayer no había recibido el pago correspondiente que marca la ley por accidente de trabajo.
Liliana Salinas Durán, con domicilio conocido en la colonia Santa Catarina, del municipio de Río Blanco, es la esposa del finado que en vida se llamó Mario Eduardo Juárez Leal, de 35 años de edad, quien murió en el interior de la empresa al ocurrir un incendio y explosión en el área de secado.
Según la esposa del finado, tiene la confianza de lograr el pago de la indemnización durante la presente semana, y acorde a los 5 mil salarios mínimos, más aparte el pago de gastos funerarios como lo marca la ley, de tal forma que se evite la denuncia penal.
Un aproximado superior a 350 mil pesos son los que debe cubrir la empresa, más lo concerniente a lo estipulado por el IMSS al gozar de esta prestación el obrero muerto, pero por lo pronto la empresa no se ha hecho responsable del pago.
De acuerdo a la versión de la agente del Ministerio Público de Ixtaczoquitlán, Nadia Fernández Garfias, el trabajador gozaba de un seguro de vida, el cual harán efectivo, pero desconoce el monto económico a recibir la viuda.
Sin embargo, por el momento la aseguradora no se ha acercado con la familia del trabajador muerto por quemaduras al 100 por ciento en el cuerpo, al quedar prácticamente calcinado en el interior del área de secado, al tener confianza la viuda de recibir dicho pago para sus dos hijos, hoy huérfanos de padre.
Cabe mencionar que el reporte del otro trabajador herido fue de gravedad, al permanecer en terapia intensiva por las quemaduras de tercer y cuarto grado que sufrió; al igual que en el caso del tabajador fallecido, la familia no se ha presentado a denunciar a la empresa por este siniestro.
Oscar JimÈnez Carrasco
El Buen Tono