ORIZABA.- Durante las últimas semanas, el Parque Nacional Pico de Orizaba fue sometido a los embates depredadores del ser humano con incendios forestales e invasión de turistas, todo sin control alguno de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONAN) y de la Comisión Nacional Forestal (CONAFOR).
Los incendios que tanto perjudican a la montaña ya que no la dejan captar agua de lluvia para los glaciares del Pico de Orizaba, cuando no son por las inmediaciones del municipio de Calcahualco, en el estado de Veracruz, provocados según las autoridades, por taladores clandestinos, se registran cerca de la cabecera municipal de Tlachichuca, Puebla.
Aunque en ocasiones la Conafor lo califica como “fuego controlado”, los incendios acaban con población adulta y de regeneración de especies coníferas en peligro de extinción.
Otro de los lastres que carga la montaña más alta de México es en la zona Sur. Es debido a los cientos de turistas que suben sin ningún control de las autoridades, pues usan autos que no son aptos para circular en la montaña”, informaron guardabosques.