Córdoba.- Locatarios del mercado La Isla han registrado un desplome en sus ventas hasta en un 50 por ciento, toda vez que la población acude al zoco Revolución debido a su ubicación. De una fila de 15 locales, por ejemplo, sólo cuatro tienen abiertas sus cortinas, mientras que el resto permanece cerrado.
Eréndira Gutiérrez, vendedora de hierbas de olor, mencionó que los que negocios que se encuentran cerrados sólo demuestran la desolación para con los pocos que se encuentran vendiendo aún.
“Hemos optado por tener abiertas nuestras cortinas pese a que la gente no entre a comprar; una de las estrategias que utilizamos es el decirles a los que se encuentran afuera vendiendo que les digan que tenemos toda clase de producto para poderles vender”, explicó.
Doña Josefa Núñez, quien se dedica a la venta de pollo, señaló que el movimiento se realiza por las mañanas, porque en la tarde ya la gente no acude por ese lugar.
“Nosotros ofrecemos comida, debemos comprar y vender lo justo ya que si no vendemos, nos vemos obligados a desechar lo poco que ya no pudimos comerciar.
En cuanto a carnicerías sólo dos se mantienen abiertas en el transcurso de la mañana, ya que también, los tahoneros cuentan con la competencia de las grandes abastecedoras de producto, que se encuentran en las afueras del mercado La Isla.
Pedro Cancero dijo que derivado a la competencia por parte de las abastecedoras, únicamente puede conformarse con su escasa venta por la mañana y un poco más en la tarde.
En definitiva, muchas son las necesidades de los locatarios del mercado La Isla en cuanto a difusión y proyección, ya que como dicen, ellos están a expensas de que una u otra persona llegue a realizarles el gasto.
“No nos quejamos porque tengamos que pagar la renta de los locales, ya que son nuestros, pero de nada sirve tener un lugar de trabajo si no se cuenta con los clientes necesarios para mantenernos a flote”, dictó.