Orizaba.- A 500 años de haberse celebrado la primera eucaristía en México, en la actualidad se ha reducido la cantidad de católicos, pero se sigue incrementando la calidad de la vida cristiana, así lo reveló el vocero de la Diócesis de esta ciudad, Helkyn Enríquez Báez.
Manifestó que a cada época le ha tocado ser iluminada por Jesucristo a pesar de que el entorno ha cambiado con sus propios desafíos, pues el hombre siempre busca a Dios, aunque no siempre del modo adecuado; a veces mediante una secta y otras por una religión.
“A lo mejor se ha reducido la cantidad de católicos, pero se ha incrementado la calidad de la vida cristiana. Posiblemente, antes se venía a la iglesia por una especie de tradición y ahora son más los que acuden por una experiencia de espiritualidad cristiana y por hacer comunidad”, aseveró el Vocero.
Mencionó que ayer domingo 6 de mayo se cumplieron 500 años de la primera Santa Misa, es decir, la presencia de Jesucristo en suelo mexicano de la mano del sacerdote Juan Díaz, esto de acuerdo con el itinerario de la expedición de Juan Grijalva en la costa de Yucatán, realizada en la isla de Cozumel.
Detalló que la esencia permanece, pues se sigue teniendo en el centro a la eucaristía, la cual -para los católicos- es el sacramento de la presencia real de Jesucristo, lo que ha cambiado es el rito, ya que en la antigüedad la lengua oficial era el latín.
Con ello, resaltó que cada época tiene sus propios desafíos y realidades, pero con un mismo compromiso: “Amar al prójimo y a Dios, mismo que se concreta de manera distinta de acuerdo con las diferentes etapas”.
Puntualizó que el hombre es espiritual por naturaleza y por eso busca a Dios, aunque no siempre del modo adecuado.
“Y a veces lo puede buscar por una ideología, a través de una secta o por una religión; reconocemos que hay dogmas históricos, como por ejemplo las grandes monoteístas y los cristianos, aunque tristemente hemos sufrido algunas divisiones, pero tenemos el mismo fundamento”, afirmó.
Destacó que en todas las épocas ha costado trabajo que la población se acerque a Dios, al recordar que en los inicios se anunciaba el evangelio en una cultura pagana politeísta, con lo servicios propios de esa etapa, al igual que en la edad media, con una vida disoluta.
“Aún así, anunciar vale la pena. Debemos seguir a Jesucristo, porque es el único que nos dará la verdadera felicidad”, reiteró.
Para finalizar, el Vocero de la Diócesis de Orizaba dio a conocer que esta fecha los está preparando para dos festividades que se celebrarán en México, como Iglesia universal.
La primera será en el 2031, la cual está relacionada con las apariciones de la Virgen de Guadalupe; mientras que la segunda será en el 2033, con motivo del gran jubileo de que Jesús diera su vida los cristianos.
