Decir dos años es bastante fácil, vivir dos años es motivo de fiesta para cualquier infante, hacer periodismo dos años es una tarea de vaivenes porque la creatividad y la verdad no siempre van de la mano y eso es lo que el periódico EL BUEN TONO ha fortalecido durante todo ese tiempo, que los lectores se acerquen con su confianza a lo verídico.
De algún lugar de su mente el empresario José Abella arrancó un trozo de su inspiración para darle a la región de los cafetos y la caña un nuevo periódico que trajera en sus páginas notas de gran interés, con apego a la realidad de lo que ocurre y acontece, nace así de la nada, EL BUEN TONO.
Se veía desde sus inicios que no era un diario con línea, no había compromisos políticos ni sociales, la idea, concreta, señalar sin miedo lo que se hace bien y lo que se construye mal. En sus páginas durante dos años nos hemos enterado de acontecimientos y personajes locales que han sido señalados por sus malas mañas y acciones, que han caído en el infortunio político por merecimiento propio.
EL BUEN TONO se ha convertido en un tomo de consulta diaria, ameno e interesante donde se expresan puntos de opinión que desatan pasiones o apaciguan emociones, tormentas que mojan al más fuerte pero que crean conciencia, después de todo esa es la tarea de la información y con esa idea nació EL BUEN TONO.
Queda demostrado que todo esfuerzo siempre vale la pena, aprendemos que las veredas fáciles desorientan y no nos llevan a ningún lugar, ahora, a sus dos años el diario EL BUEN TONO camina con fuerza y a paso seguro se irá fortaleciendo en el Estado de Veracruz como un medio escrito al que temerán los poderes políticos y sociales, como dice José Abella: Las verdades arden…y agrego…. pero NO DEJAN CENIZAS.
Felicito a todo el personal administrativo, operativo, de confianza que hace posible la edición diaria, a los voceadores que con agua, sol y frío, gritan todos los días: ¡¡¡ El Buen Tono !!! ¡¡¡ El Buen Tono !!!
Dios les bendiga.
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