Por: Andrés Timoteo/ columnista
Las dos mediciones más recientes sobre la intención del voto de los veracruzanos siguen colocando al exalcalde de Boca del Río, Miguel Ángel Yunes Márquez como puntero y, en segundo lugar, al diputado federal con licencia, Cuitláhuac García Jiménez. La coincidencia de ambos sondeos es que, entre esos dos abanderados, el primero por la coalición “Por Veracruz al Frente” (PAN-PRD-PMC) y el segundo por la alianza “Juntos haremos historia” (Morena-PT-PES), se dará la disputa real de la gubernatura.
Lo anterior ya se sabía, aunque esas mediciones muestran distancias importantes a citar.
Por ejemplo, los números de la Firma Votia colocan a Yunes Márquez con un 47.7 por ciento de la preferencia electoral, sacándole una diferencia de 11.3 puntos a García Jiménez, ubicado con un 36.4 por ciento. Es la segunda encuesta elaborada por Votia que arroja un liderazgo para el boqueño Yunes Márquez.
En tanto, el portal SDPNoticias acaba de difundir un sondeo para las 9 gubernaturas que se renovarán este año y respecto a Veracruz, su medición también le da una ventaja a Yunes Márquez, aunque mínima, de apenas 0.7 por ciento, frente a García Jiménez. El panista tiene 31.2 por ciento de intención del voto y el morenista 30.5 por ciento.
Y en estos supuestos, también hay detalles que delatan posibles sesgos. Para empezar, las mediciones de la Firma Votia se han realizado, según la metodología explicada, en encuestas cara a cara a mil 200 personas, mientras que SDPNoticias sólo tuvo una muestra de 500 personas, menos de la mitad de la primera. Como se sabe, entre más pequeña sea la muestra, más grande será el margen de error lo que, según los expertos, le resta confiabilidad al resultado.
Otro punto es que SDP significa “Sendero del Peje”, es un portal informativo surgido en 2012 y estrechamente ligado a Andrés Manuel López Obrador y, por ende, al Movimiento Regeneración Nacional (Morena). Se fundó, de acuerdo con lo pregonado, para difundir información sobre las actividades, agendas y posicionamientos del tabasqueño frente a lo que calificaban como ‘bloqueo informativo’ de los grandes corporativos mediáticos: televisión, radiodifusoras y periódicos de circulación nacional.
Eso explicaría la mínima distancia que concede entre el primero y segundo lugar del sondeo para Veracruz. Es más, en la página digital de esa agencia se afirma que hay “empate técnico” y comienza la relatoría destacando al segundo lugar, no al primero, o sea invirtiendo la lógica para presentar la noticia al lector. Es clara, entonces, la intencionalidad de la medición y también de la información sustentada en la misma.
El tercer punto que resaltar es que, en esas dos mediciones demoscópicas, el rezagado es el candidato de la alianza “Por un Veracruz mejor” (PRI-PVEM), José Yunes Zorrilla pues la Firma Votia le otorga 14.8 por ciento y SDPNoticias 19.6 por ciento, y en el caso específico de Votia, entre el primero y tercer lugar hay un abismo de 32.9 puntos.
Habrá que esperar los nuevos sondeos y el resumen de estos dos referidos es que las dos casas encestadoras coinciden en que el boqueño lidera las preferencias y el jalapeño lo secunda, y que Yunes Zorrilla no remonta el tercer lugar. Los supuestos son que entre Yunes Márquez y García Jiménez es la competencia verdadera y que el PRI registraría otra derrota histórica en las ánforas comiciales, más dramática aún que la del 2016.
LAS MENGUAS
Respecto a la contienda por la Presidencia de la República, el periódico El Universal publicó ayer el sondeo más reciente, elaborado por la casa encuestadora Berumen y Asociados, que coloca a López Obrador como delantero con un 42 por ciento de la preferencia ciudadana y al panista Anaya en la segunda posición con 31.1 por ciento, es decir, hay una distancia de 10.9 por ciento entre ambos.
El dato no es menor porque en las mediciones anteriores al inicio de la campaña formal, la distancia del tabasqueño oscilaba entre los 15 y 20 puntos porcentuales. Esta encuesta fue realizada entre el 3 y 5 de abril pasados, es decir ya en el bastidor de la campaña oficial. Los suspicaces -sobre todo los simpatizantes de López Obrador- ponen el grito en el cielo con tales cifras pues si bien su candidato sigue como puntero, la diferencia entre el primero y segundo lugar comenzó a menguar.
Esos 10 puntos de distancia ya no son inalcanzables como se decía antes, y quedan 80 días de campaña para reducirla más. Ese es otro supuesto y sería, acaso, la estrategia planeada para disminuir al tabasqueño al menos en la percepción demoscópica. Otro dato interesante es que en la “preferencia bruta” de dicho sondeo -cuando se le pregunta al encuestado por el candidato y el partido que quieren votar- la distancia baja aún más para el tabasqueño y Morena que tienen 34.6 por ciento de la intención del voto.
Por su lado, el queretano y el PAN alcanzan el 25.6 por ciento. Hay una diferencia de 9 puntos entre López Obrador-Morena y Anaya Cortés-PAN, casi 2 puntos menos que la preferencia por el candidato solo. La lectura es que el partido Morena sería utilitario. Los ciudadanos van a votar por López Obrador más que por Morena, pues añadiéndole la institución partidista pierde 7.4 puntos. Lo mismo para Anaya Cortes al que si se le junta con el partido, desciende 5.5 puntos, una mengua menor que a la de Morena, pero aun así es una disminución.
Así, los votantes mostraron -en ese supuesto- que su decisión se basaría más en la persona que en el partido. Y la coincidencia de la medición de Berumen y Asociados con las encuestas locales de Veracruz es el drama para el tricolor: José Antonio Meade, candidato de la alianza PRI-PVEM sigue en el tercer sitio como lo hace Yunes Zorrilla en la disputa por la gubernatura. Meade Kuribreña obtuvo 21. 9 por ciento de la intención del voto, la mitad que López Obrador y 9 puntos abajo que Anaya.
No levanta las campañas de Meade y el PRI. Peor aún, a la pregunta de ¿cuál es el candidato por el que nunca votarías?, el 40.2 por ciento de los encuestados respondió que por Meade -ahí es a la inversa de López Obrador-, y el 21.3 por ciento por López Obrador y un 14.7 por ciento por Anaya Cortes. Esto también significa que en el electorado mexicano hay un marcado “antipejismo”, un segmento poblacional que lo rechaza puntualmente. Vaya, los priistas no son, al final de cuentas, los únicos malqueridos.
De colofón está la expanista y ahora disfrazada de “candidata independiente”, Margarita Zavala Gómez del Campo, esposa del expresidente y genocida Felipe Calderón Hinojosa. Ella no tiene más que un 5 por ciento de aceptación ciudadana y su papel en la contienda presidencial se reducirá a robarle votos al panista Anaya Cortés, si es que éste no se reconcilia con Los Pinos y se erige como el ‘Plan B’ para vencer a López Obrador.
Y para que las cosas estén equilibradas, no a favor de la democracia sino del proyecto para frenar al tabasqueño, el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) amparó al gobernador con licencia de Nuevo León, Jaime Rodríguez Calderón, conocido como “El Bronco”, para que se le otorgue el registro como candidato “independiente” pese a que intentó burlar a las autoridades electorales al presentar firmas falsas para sustentar su inscripción como aspirante a Los Pinos.
El rescate judicial del regiomontano no es casual ni gratuito. Desde hace tiempo, Rodríguez Calderón se enfocó a atacar a López Obrador y ahora, ya en el rejuego, será el ariete contra el tabasqueño en la campaña formal. “El Bronco” hará el mismo papel en el sicariato electoral, que Margarita Zavala para atacar al queretano Anaya.
RÉCORD DE PIFIAS
El panista Julen Rementería del Puerto parece un improvisado en los menesteres electorales. Apenas van diez días de campaña formal en busca del Senado por la alianza PAN-PRD-PMC y ya acumula al menos tres pifias en su haber que encendieron las redes sociales y los despachos de prensa en su contra: primero fueron los anuncios publicitarios anticipados a fecha autorizada para iniciar el proselitismo y luego, la supuesta visita a los padres de una joven asesinada para sustraerle el bebé del vientre en Lerdo de Tejada, buscando colgarse de la tragedia.
Lo más reciente, la propaganda en la que presume obras de calidad, pero que fue colocada a un costado de carreteras desastrosas. Y las teorías para explicar tales torpezas hacen que muchos se devanen los sesos, no porque la candidatura de Rementería sea algo sublime sino para saciar el morbo de los desocupados. Unos dicen que el responsable es el locutor Javier Moranchel, también exconductor de TV Azteca Veracruz, habilitado como asesor del candidato.
Según los enterados, este locutor estaría en jaloneos permanentes con Elizabeth Ramírez, la eterna vocera del mismo clan y con otros asesores de la campaña de Rementería -por cierto, ayer la señora Ramírez renunció a veinte años de vocería con los Rementería Molina, pues no soportó las intrigas del exconductor televisivo-.
El candidato panista debería prepararse para lo peor, ya que Moranchel fue uno de los operadores mediáticos de Héctor Yunes Landa en 2016 y ya ven cómo le fue. Otros más aseguran que es el mismo Rementería y su hijo, de nombre Bigen, quien es diputado local y buscará la reelección, los que han tomado las decisiones equivocadas en la campaña que los han llevado a estos entuertos. Tal explicación es razonable porque a ninguno de los dos se les da mucho eso de las propuestas inteligentes o, más bien dicho, de la actividad neuronal.
Crueles como ordena el reglamento, los compañeros reporteros que cubren la fuente del congreso local cuentan divertidos que si alguien le da un golpe en la cabeza al NiNi Rementería se puede escuchar el eco que se repite y se repite. Risas. Pero sea una cosa u otra, el panismo tiene un boquete abierto en la propia candidatura del exsecretario de Infraestructura y Obra Pública del gobierno estatal. Ahí tendrá que entrar al quite del comité estatal y los operadores yunistas para meter una palanca y rescatar la campaña de Rementería sino quieren perder la curul senatorial ante los candidatos de Morena.