Nogales.- Entre una polvareda se encuentra la congregación El Encinar por la falta de pavimentación en más de 15 calles.
En este lugar, más de tres mil habitantes aspiran el polvo suelto de los caminos, lo que les ha provocado alergias e infecciones respiratorias.
Vecinos de la calle Colima expresaron que la situación se agravará y será más perjudicial durante la próxima temporada de calor y de suradas, ya que el viento arreciará, creando nubes de polvo. “Las partículas se sienten hasta en los dientes”, dijeron.
“El que camina por aquí, seguro se va todo ‘empanizado’ de tierra. Cuando el aire está muy fuerte, como por abril y mayo, no nos queda de otra más que regar constantemente agua para aplacar el polvo”, expresó la señora Juventina Rosas.
En lo que respecta a la Salud, aseguraron que debido el levantamiento excesivo de polvo (originado por el paso de los carros) resultan afectados los adultos mayores y los niños, mismos que “conviven” con la tierra cuando van a la escuela o juegan en las calles.
Para aminorar tal situación, los habitantes manifestaron que riegan cubetas con agua varias veces al día y cubren con plásticos sus alimentos.