Amatlán.- Familiares de internos del penal de mediana seguridad La Toma se manifestaron ayer lunes frente al Cereso para pedir la inmediata destitución del director Valentín Hernández Santiago, ya que argumentan que existe “cobro de piso”, así como violencia física y psicológica en el reclusorio.
A decir de los inconformes, los atropellos que comente el encargado se deben a órdenes directas del director general, Raúl Plantón del Cueto, quien recibe fuertes cantidades de dinero.
Portando cartulinas con leyendas como: “No humillación a los internos”, “Queremos fuera al director Valentín Hernández Santiago y a sus 15 custodios” y “Ya no más cobros en las visitas”, los manifestantes llegaron al Cereso alrededor de las 12:00 horas.
Por otro lado, dieron a conocer que algunos de sus familiares fueron trasladados a otros penales del Estado o de otras entidades, sin que se les notificara con anterioridad. “Ahora no sabemos qué les pudiera estar pasando”, comentaron.
Gritando consignas en las que pedían que saliera el Director para atenderlos, el grupo de personas permaneció afuera del inmueble durante varias horas, a la vez que solicitó la intervención del Gobernador del Estado, a quien le hizo un llamado para que intervenga y haga que se respeten los derechos de los reclusos.
Cerca de las 13:00 horas, el grupo de manifestantes fue atendido por el delegado regional de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH), Manuel Antonio Sánchez Hernández, quien recibió sus quejas y se comprometió a revisar los casos expuestos para darles una pronta solución. A las 14:00 horas, elementos de la Policía Estatal y de la Fuerza Civil desalojaron por la fuerza a los inconformes y detuvieron a siete de ellos, a quienes trasladaron al Mando Único.