El Fondo Monetario Internacional (FMI) estimó ayer que la economía mexicana crecerá 2.1 por ciento en 2017 y el consumo privado será el principal motor de la actividad, respaldado por las exportaciones manufactureras, mientras la inversión se ha mantenido débil, en medio de la incertidumbre, por el futuro de las relaciones comerciales entre México y Estados Unidos.