Es un honor presentarles en esta edición a una estrella del ballet internacional: Taras Domitro, nacido en La Havana, Cuba, se encuentra en la ciudad como invitado especial del Octavo Festival de Danza Córdoba 2017 y ayer tuvimos la oportunidad de asistir a uno de sus ensayos en el Centro Cultural de la ex- Hacienda San Francisco Toxpan, donde nos platicó acerca de su trayectoria y sus proyectos.
Taras, incursionó en la danza clásica a la edad de los 10 años, formó parte durante cuatro años del Ballet Nacional de Cuba, siendo el bailarín principal, después, perteneció al San Francisco Ballet donde sostuvo un contrato por ocho años, reconoce que gracias a la experiencia de estar en dos compañías tan importantes ha logrado ser lo que es.
El cubano de 31 años actualmente no está en ninguna compañía y considera que trabajar por su cuenta es algo que disfruta, “en ese momento de mi carrera me siento muy bien trabajando como freelancer, tengo más tiempo libre, y viajo mucho por todo el mundo”, comenta mientras voltea y se sonríe con su compañera actual de aventuras, la talentosa bailarina Adiarys Almeida, que a su vez también es una gran bailarina de talla internacional, con quien ahora ha formado un excelente acoplamiento y que junto a otro bailarín de igual nacionalidad asombrarán al público cordobés en esta gala de clausura del octavo festival de Danza Córdoba.
No es la primera vez del bailarín cubano en México, ha tenido oportunidad de estar aquí en más de una ocasión y platica con gusto que ha visto cómo ha progresado el mundo del ballet, principalmente en nuestra región: “En Cuba hay una cultura de ballet desde hace muchos años, mucha pasión, pero también veo esa pasión aquí, el nivel ha subido mucho desde la primera vez que vine a Córdoba hace cuatro años y a México hace ya quince años”.
En la encomienda de formar parte de la última gala del festival, viene a su mente gratos recuerdos de cuando comenzaba este sueño de ser bailarín profesional, “tengo la memoria de cuando era niño y tenía esa sed de ver a las grandes estrellas de la danza y los admiraba, entonces yo pienso que si ahora sirvo de ejemplo e inspiración para los jóvenes, es una de las más grandes recompensas y se siente de lo más bonito”.
“Yo me siento muy bien con lo que he logrado hasta ahora, y lo que quiero para el futuro es seguir bien físicamente, haber hasta donde duro”, añadió entre bromas el carismático y bailarín, quien después de deleitar esta noche a los asistentes del festival, viajará a China para continuar compartiendo su arte con el mundo. Talento y pasión por la danza son este par de estrellas.