P. del Macho.- No le importa pasar hambre, tener frío y estar bajo la lluvia, Juan Carlos busca a su padre, quien decidió abandonarlo a él y a dos hermanos por irse con otra mujer, dejando a su primera esposa a su suerte, sin hacerse responsable de los hijos que ambos procrearon.
Jassiel Miranda Castillo, es el nombre del padre de Juan Carlos, quien tiene 11 años y lo extraña, pues pasan los días y no lo ve, por ello salió de su casa el pasado lunes, pero no tuvo éxito en su búsqueda, estaba en una banqueta de la colonia Santa Isabel, donde los vecinos se percataron de que algo le sucedía, pues tiritaba de frío, arrinconado entre la lluvia y la oscuridad de la pared de una vivienda.
Los vecinos se alarmaron, porque eran las 22:00 horas y el pequeño estaba solo en la calle; cuando fue cuestionado por los pobladores no pudo contenerse, lloró y por miedo no aceptaba el alimento que le era ofrecido.
Cuando lograron que se controlara, les contó que su mamá estaba trabajando, sus hermanos de 5 y 8 años estaban en la casa, que había salido a buscar a su padre que anteriormente había vivido con ellos en Actopan, pero que hace cinco años los dejó porque se fue con
otra persona.
Al cabo de un rato, una mujer buscaba a su hijo; ella conserva aún su lengua autóctona y un poco de español, quien indicó que es de una localidad zapoteca de Oaxaca y se vino a vivir con su esposo, del que se enamoró perdidamente, pero en Paso del Macho la abandonó con sus tres hijos para irse con otra mujer.
Reconoció que su pequeño desea ver a su papá, lo extraña y sale a buscarlo sin éxito; además, indicó que el padre no ha querido siquiera visitar a los pequeños. Este hombre considera que los dejó “bien” viviendo con sus padres, sin embargo, ha trascendido que los abuelos los humillan y golpean, motivo por el que ya interpuso en septiembre una denuncia ante el Sistema Municipal para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) y en la Fiscalía Regional, debido a las lesiones que le han provocado a los menores.
Rosario Morales Juárez hace todo lo que está en sus posibilidades: trabaja vendiendo de casa en casa verduras, ayuda en locales donde venden antojitos, también se desempeña como empleada doméstica, pues debe mantener a sus tres hijos.
La familia vive en una cuartería, no cuentan con estufa; una vecina altruista les lleva de comer y cenar a los niños; tienen un sólo colchón para dormir y en su desesperación, Juan Carlos deja a sus hermanitos y sale a las calles a buscar a su papá.
Morales Juárez no recibe ningún apoyo por parte del Gobierno, no tiene ni Prospera, nada que la ayude a enfrentar la situación que vive, pues Jassiel Miranda Castillo no paga la manutención de los menores, no los ve, dañando así a su descendencia.
