La gente bonita de la ciudad sabe bien cómo disfrutar de sus mañanas y más aún las gentiles damas de esta sociedad orizabeña.
Ellas se dan cita en los diferentes restaurantes de la Pluviosilla, con la finalidad de disfrutar momentos especiales entre amigas.
Degustando de un exquisito cafecito que marca el inicio de los primeros alimentos del día, así como poniéndose al día compartiendo una amena charla y luciendo grandes sonrisas de lo bien que la pasan juntas.