Orizaba.- Demandan estudiantes del Colegio Preparatorio Orizaba (CPO) la reubicación, por considerar que el plantel representa grave riesgo por las grietas y la falta de medidas de seguridad. Tras dos manifestaciones, una por la mañana y otra al mediodía, lograron el apoyo del Ayuntamiento, les prestará a los alumnos del quinto semestre la sala Ignacio de la Llave del Palacio Municipal, además, personal altamente calificado realizará una revisión minuciosa a la infraestructura para determinar si es segura o no.
Desde las 08:00 horas padres de familia y alumnos se reunieron en la alameda Francisco Gabilondo Soler, en el chipi-chipi y a los pies del monumento al general Ignacio de la Llave analizaron sus temores y las medidas a tomar ante el miedo de estudiar en el edificio, en los turnos matutino, vespertino y abierto los fines de semana, es decir, más de mil adolescentes.
Tras casi dos horas, fueron con la directora Adriana Martínez. Al hablar con ella cerraron la circulación de la Norte 4, en donde le hicieron saber que no regresarán al colegio y quieren ser reubicados, ya que a pesar de que les indique Protección Civil que el edificio es habitable, no hay las medidas de seguridad requeridas, sólo tienen como acceso la puerta principal.
En tanto, la Directora les informó que en compañía de los profesores se reunirán con PC municipal y regional, después tomarán la decisión, junto con los alumnos. A las 12:00 horas regresaron acompañados de más compañeros y padres, con cartulinas les hicieron saber que hasta ese momento no se contaba con un dictamen, por lo que decidieron acudir al Palacio en manifestación.
Con “Queremos una escuela segura”, “Reubicación”, “Merecemos mejores condiciones”, los alumnos y padres marcharon por Norte 4, Oriente 3 hasta Poniente 2 y luego por la Norte 7, quedando en la puerta principal del Palacio Municipal, gritando consignas, sin embargo, las puertas fueron cerradas y entró una comisión.
Afuera, una alumna informó que las instalaciones están desgastadas, por lo que la reubicación debe ser inminente, además de que se merecen mejores instalaciones, por lo que no regresarán a la escuela.
“Si es necesario que tomemos clases afuera vamos a hacerlo, no es por incumplidos o porque no queramos clases; hay vidas en peligro de maestros, alumnos, gente que va a las instalaciones por cualquier motivo”, insistió.
Resaltó que hay grietas en el plantel, además de que el barandal de la única escalera que hay está en muy malas condiciones, “lo agarras tantito y se mueve, las escaleras están cuarteadas y los salones muy chiquitos, ahí tenemos clases 50 alumnos, tan sólo en el área de Biológicas son 60 y no es justo que sea tanta población estudiantil en un plantel que no fue diseñado como tal, era un convento, hay una entrada y salida, para 10 grupos arriba”.