Atoyac.- La ilusión de René era ir a jugar a Laredo, Texas, en el Williamsport el pasado fin de semana.
Para ello se había preparado desde hace mucho tiempo, sin embargo, un grupo de personas del equipo Cachorros, al que pertenece la Liga de Formación de Béisbol y Softbol de Córdoba, no permitió que viajara, porque si él subía al autobús sus “compañeros” se bajarían.
El padre del pequeño de 10 años, René Alonso Ojeda Hernández, decidió romper el silencio tras la indignación de vecinos de la Villa General Miguel Alemán, quienes denunciaron públicamente la discriminación y el rechazo del que fue objeto el niño.
“El pasado jueves, cuando saldría el autobús, el expresidente de la Liga, Honorio Herrera, le indicó al actual titular, Antero Flores, que si nosotros subíamos al autobús, él y otros jugadores, junto con su familia, se bajarían”, expresó.
Posteriormente, les impidieron el paso y los dejaron a las 03:00 horas en Córdoba, sin que pudieran hacer nada, pese a que él y la esposa del Presidente de la Liga habían solicitado el autobús al Ejecutivo Estatal en su visita al municipio para anunciar la reparación de una carretera.
René Alonso, como todos los demás padres, había gestionado su Visa, pero -junto a otros cinco- se la negaron.
Por lo anterior, fue objeto de los señalamientos del expresidente de la Liga, quien lo cuestionó sobre el porqué no le dieron el documento, siendo que él había vivido en Estados Unidos, poniendo en duda su honorabilidad.
Ante ello, el padre de familia le indicó que “no había hecho nada malo y que si lo hubiera efectuado no se expondría, por lo que al tener la conciencia tranquila la había gestionado y desconocía los motivos por los que se la negaron”.
También explicó a los representantes de la Liga que su hijo sí podía viajar sin ningún problema, debido a que tiene doble nacionalidad, es decir, la mexicana y la norteamericana, al haber nacido en el País vecino.
Por esta razón, en caso de no poder viajar con su hijo, él le daría una Carta Poder al Presidente de la Liga para cumplir la ilusión de su pequeño.
“Me alentaron a no perder la esperanza y a conseguir unos permisos. Me habían comentado que podíamos investigar si nos los podrían otorgar en Córdoba, en México o en Laredo, antes de emprender el viaje. También había manifestado que tenía la intención de quedarme en Estados Unidos si obtenía la Visa, pues había gastado mucho en gestionarla y para recuperarme quería trabajar allá unos meses. Además, expresé que si sólo obtenía un permiso me acataría a él, pues lo que yo más quería era ver jugar a mi hijo”, aseveró.
Sin embargo, algunos desvirtuaron sus comentarios y señalaron “que no llevarían ‘mojados’, pero al resto de las seis personas que no obtuvimos la Visa sí las llevaron junto con sus hijos. Sólo yo fui rechazado al lado de René, quien se había preparado y sin razón alguna no le permitieron subir al autobús. Yo quería que él cumpliera su sueño, aún si a mí no me dejaban pasar, ya que podía esperarlo de este lado de la frontera y encontrarlo cuando el autobús regresara a Atoyac”, señaló.
René, un pequeño de 10 años de edad, diariamente dedica a la práctica del béisbol aproximadamente de una hora y media a dos. Hoy, ese niño se encuentra triste, sin querer comer por el rechazo del que fue objeto y sobre todo porque su equipo presume haber ganado una medalla y un anillo de oro.
Los vecinos solicitan la intervención de las autoridades, ya que Honorio Herrera, expresidente de la Liga, le “destruyó” el sueño a un niño de jugar en el Williamsport y le quitó la oportunidad de pichar para iniciar el torneo “Vamos a Jugar en Poza Rica”, sólo por favorecer a su hijo.