Córdoba.- Tras su retorno al Palacio municipal, el alcalde Guillermo Rivas Díaz, calificó de absurdas las voces que afirman que su permanencia en el Ayuntamiento “esté en juego”, aseverando que sólo se tomó tres días y punto.
“Me tomé tres días de ausencia punto…sin explicar, estuve tres días ausente, pónganme falta (…) ingresé una carta a la Oficialía Mayor, aunque no pensaba ausentarme tres días, pero en último momento sí lo hice, pero lo notifiqué”, explicó el munícipe.
En cuanto a la serie de especulaciones que apuntaban su retiro y el retorno de Portilla –el alcahuete de Lavín-, Rivas Díaz tajantemente señaló, “esas son especulaciones, yo no sé nada al respecto, yo me ausenté por asuntos personales”.
Con ello, el munícipe dejó en claro que su permanencia en la presidencia, no está “en juego”, como muchos lo afirman, esto tras el encuentro que sostuvo hace unas semanas con el gobernador del estado, Javier Duarte de Ochoa y con el alcahuete de Lavín.
Ante la insistencia de los medios de comunicación, en conocer su opinión en relación al revuelo que generó su ausencia y por qué evitó someter la separación de su cargo al Cabildo, el edil detalló, que al desconocer de este procedimiento se limitó a entregar un documento el miércoles a las doce de la noche, mismo que fue entregado al Oficial Mayor, “no quisiera entrar a lo legal, porque realmente ni lo sé”, expuso.
En otro orden de ideas, y prácticamente a cinco meses de concluir su encargo, Rivas Díaz dijo, “no hay mucho por hacer ya o planear, ya que se debe comenzar a hacer el cierre administrativo, siendo agosto, septiembre y octubre los meses que realmente quedan de trabajo”.
Al respeto, explicó que las direcciones que se puedan considerar estratégicas estarán disponibles para los próximos funcionarios, mediante un escrito, le puede solicitar conocer el manejo de determinada área delegando a una persona en especial para que pueda familiarizarse en el procedimiento, garantizando responder todas las preguntas.
Finalmente comentó que de las 150 obras que se ejecutan actualmente, la única que podría quedar pendiente es la de la ampliación del bulevar Córdoba-Fortín, que se hace a 4 carriles, pues uno de los tramos no ha podido ser adquirido por el municipio ya que la dueña no se ha encontrado y se trata de tres cuadras que se deben ampliar.
Ricardo Jácome Zavaleta
El Buen Tono
