¡Vamos a decir la verdad, aunque tengamos que salir corriendo!
Basta ver el estado de contaminación que tienen todos los ríos y arroyos de la ciudad, para suponer el estado de civilidad que hay en sus habitantes; no hay uno que no esté contaminado, es una verdadera lástima que en esta zona en donde en menos de 500 metros haya hasta entubados por lo pestilencia que despiden, cuando en Europa pasan ríos por el centro de las ciudades y no tienen ni siquiera hojas de los árboles de tan limpios que están.
Bien lo dijo el director de Tránsito estatal, Roberto López Santoyo, que ya llevan recaudado en promedio un millón de pesos mensuales por las sanciones que aplican en sus operativos, y por qué entonces no se dan cuenta que están dañando la economía y la comodidad de los ciudadanos, por qué no le hacen una auditoría a Barquet y a Portilla -el alcahuete de Lavín- para investigar a dónde iba a parar todo lo que recaudaban ya que sólo reportaban 120 mil pesos al Ayuntamiento, a todas luces se los robaban, pero parece que al Mando Único sólo le interesa estar jorobando a los que menos tienen porque a los funcionarios no los tocan; pareciera que para ellos no hay Ley.
Esos operativos, justo después de las elecciones, es como si fuera una revancha venir a cobrar a los cordobeses el voto que dieron a favor del PAN y no del PRI, y ahora que están los ciudadanos con el regreso a clases, que genera un gran gasto para todos, les quitan a veces hasta la moto que no han terminado de pagar y la ocupan para ir a trabajar; tienen que pagar ahora la multa más la grúa, más el regreso a clases; eso es no tener humanidad, pero con estas acciones seguramente se irán, pero al infierno.
Mientras las autoridades siguen agarrando borrachitos, los carteristas siguen robando a sus anchas en Walmart, hasta en contubernio seguramente con los empleados de este supermercado, en lugar de que pongan al Mando Único a vigilar constantemente el estacionamiento, ya que no tiene ni cámaras ni policías privados.
Por enésima ocasión obra del Museo de la Ciudad está detenida, en cuatro años sólo existe un progreso del 30 por ciento, el avance en la obra es una muestra de la ineptitud de las autoridades y sobre todo del patronato que está a cargo del museo.
