Córdoba.- Por anomalías graves en el manejo higiénico de los alimentos, la Coordinación de Protección Contra Riesgos Sanitarios de la Jurisdicción Sanitaria Número 6 suspendió un establecimiento de venta de pollo rostizado. A ello, se suma la tercera supresión de una purificadora de agua de la ciudad de Fortín, la cual también registró diversas irregularidades.
Según el coordinador del área, Jaime Medina Gallardo, en el establecimiento de venta de pollo se detectaron más de 30 violaciones a las normas sanitarias, entre ellas, la presencia de fauna nociva. En ambos casos se aplicó una suspensión de actividades como medida de seguridad.
En lo que va del año, se han aplicado dos suspensiones provisionales a plantas purificadoras de agua de Córdoba y Coscomatepec, mismas que ya solventaron las observaciones. En la más reciente (Fortín), se determinó la suspensión al detectar la falta de delimitación del área de la zona de llenado de los garrafones. Las dos primeras ya completaron el proceso para su reapertura al corregir las anomalías señaladas.
El comercio de pollo será reabierto hasta que demuestre haber subsanado las observaciones y -por tratarse de una suspensión temporal- no se le aplicará una sanción económica.