Tlaltetela.- Un empleado de la línea de autobuses ADO se llevó un gran susto, debido a que, cuando circulaba por la carretera estatal Totutla-Tlaltetela, sujetos fuertemente armados a bordo de un Nissan Tsuru intentaron interceptarlo para obligarlo a detenerse, sin embargo, el trabajador implimió mayor velocidad, logrando escapar de los pistoleros.
Alrededor de las 21:00 horas, una llamada de auxilio alertó a los preventivos que se ubican justo en la entrada de Tlaltetela, sobre una persona que había sufrido un atentado, por lo que los uniformados se trasladaron inmediatamente al lugar, encontrando a un sujeto estacionado en sitio indicado.
Los efectivos se entrevistaron con el agraviado, quien responde al nombre de Carlos Rivera Velasco, de 53 años de edad y con domicilio en el municipio de Emiliano Zapata, el cual conducía una camioneta tipo Pick-Up con destino a la ciudad de Xalapa.
Carlos Rivera, quien se encontraba con un cuadro de crisis nerviosa, explicó que en la entrada a la comunidad Ohuapan, unos sujetos a bordo de un Nissan Tsuru color azul realizaron varias detonaciones de arma de fuego con la finalidad de que se detuviera -al parecer- para despojarlo del efectivo que portaba en ese momento.
Haciendo caso omiso a los proyectiles, el empleado rápidamente imprimió mayor velocidad con la intención de perder a los pistoleros, siendo a la altura del municipio de Tlaltetela donde detuvo su marcha para pedir el apoyo de las autoridades.
Varios curiosos abordaron la unidad con la intención de buscar los proyectiles percutidos, pero no hubo registro de que hubiera alguno incrustado en el vehículo.
Los gendarmes aconsejaron a Carlos Rivera que interpusiera una formal denuncia ante las instancias correspondientes, quienes se encargarían de realizar las indagaciones correspondientes para dar con los delincuentes.
