Cuando uno de los integrantes del FPR caminó con rumbo a la calle 3, entre avenidas 1 y 2 a comprar un refresco, las Fuerzas del Orden inmediatamente se abalanzaron sobre el joven y lo esposaron.
Posteriormente, varios vendedores salieron en su defensa y ahí aprovecharon para detener a otras tres personas, incluso una de ellas mencionó que ni siquiera era parte de los manifestantes.
Eran alrededor de 40 elementos que de forma arbitraria y prepotente cercaron a los vendedores, mientras personas que transitaban por el lugar se mostraron sorprendidas por lo que estaba pasando, ya que parecía un operativo para detener a ladrones, asesinos, aquellos que han ocasionado un daño a la sociedad.
SE LLEVAN A LÍDER
Mientras Guadalupe Ibáñez solicitaba el apoyo de los ciudadanos para evitar que detuvieran a sus compañeros y evidenciar la clase de autoridades represoras que hay en Córdoba, encabezadas por Ríos Bernal, fue cercada por un grupo de elementos.
La dirigente fue detenida de forma arbitraria cuando intentaba resguardarse dentro de una farmacia ubicada en la avenida 2, demostrando así lo que ya había señalado: Los policías no brindan seguridad a los ciudadanos, sino que actúan en contra de aquellos que solamente buscan una forma de llevar comida o dinero a sus casas.
Durante la trifulca algunos integrantes del FPR y civiles fueron rociados con gas pimienta por parte de elementos de la Fuerza Civil. A todas las personas que fueron detenidas en ningún momento se les leyeron sus derechos ni el motivo por el cual estaban siendo arrestadas.
TOMAN EL BULEVAR
Comerciantes ambulantes se manifestaron en el bulevar Córdoba-Peñuela, bloqueando los carriles en ambas direcciones, solicitando la liberación de sus compañeros detenidos durante la tarde de ayer en el Centro de la ciudad, en su mayoría pertenecientes al Frente Popular Revolucionario.
Por lo que a pesar del aguacero, los manifestantes se mantuvieron estoicos, prendiendo llantas que la fuerza de la lluvia se encargó de apagar.
A pesar de ser auxiliados por sus abogados, quienes habían pagado una multa de mil 600 pesos para la liberación de Guadalupe Ibáñez, líder del FPR, a quien las autoridades del Mando Único se negaban a entregar, situación que mantuvo a los manifestantes en su posición de mantener tomada dicha vía. Alrededor de las 20:00 horas, un grupo de 100 granaderos y elementos de la Fuerza Civil detuvieron a por lo menos cinco manifestantes más, ingresándolos a las instalaciones del Mando Único. Finalmente, alrededor de las 23:00 horas, Guadalupe Ibáñez y un menor de edad fueron puestos en libertad.
Hasta el cierre de esta edición, faltaban seis personas más por abandonar los separos, ya que tenían que pagar una fianza de 860 pesos.
