CHOCAMÁN.- Un trágico accidente se registró la noche de ayer sábado, cuando el operador de un autobús de la línea “Astro” perdió el control del volante y terminó saliéndose de la carretera federal Huatusco-Fortín, precipitándose a un barranco, causando que los tripulantes resultaran gravemente lesionados, mientras que el conductor quedó prensado entre los fierros retorcidos, siendo auxiliado por los cuerpos de rescate.
Todo sucedió al filo de las 21:19 horas, cuando Andrés “N”, con domicilio en la Ciudad de México, conducía una autobús marca Dina, modelo 1993 y placas de circulación 119-R14, el cual trasportaba alrededor de 12 pasajeros, quienes laboran en la capital del País y se dirigían al municipio de Coscomatepec.
De acuerdo con datos oficiales, en el momento en que Andrés se desplazaba sobre la mencionada carretera, al llegar a la altura del lugar denominado Paso Limón, perdió el control del volante, provocando que se saliera de la cinta asfáltica y terminara precipitándose a un barranco de más de cincuenta metros de profundidad.
Rápidamente, la Policía Municipal, al mando de Juan Pablo Hernández Trujillo, auxiliaron a los pasajeros, pidieron apoyo a los cuerpos de rescate y abanderaron la zona para evitar un accidente mayor.
Por su parte, elementos de Protección Civil (PC) de Chocamán, Bomberos de Coscomatepec y la Cruz Roja Mexicana con base en la ciudad de Córdoba, descendieron inmediatamente al profundo barranco y con diferentes maniobras lograron sacar a los usuarios de entre los fierros retorcidos.
Tres de los lesionados y el conductor de la unidad terminaron gravemente heridos, por lo que minutos más tarde fueron rescatados y llevados a un hospital de la zona.
Se dio a conocer que los pasajeros fueron identificados como: Pedro Espinosa Flores, de Huatusco; Alejandro Morales, Israel Vargas; Alejandro Silverio, de Coscomatepec; Carmelo Eliseo Rosas, de Ixhuatlán del café; Ernesto Arroyo Gerardo, de Calcahualco; los demás tripulantes no otorgaron sus generales.
Al lugar también acudieron elementos de la Policía Federal, División Caminos, quienes tomaron conocimiento de lo sucedido y ordenaron al personal de las grúas que arrastrara la unidad siniestrada a un corralón, mientras se deslindan responsabilidades.