ORIZABA.- Se estima que el 7 por ciento de los hombres en México padecen depresión, pero por situaciones culturales suelen no reconocerlo y retrasar el diagnóstico, así como prolongar el sufrimiento, incluso por años.
La subdirectora Médica del Hospital de Psiquiatría con Unidad de Medicina Familiar (UMF) No. 10, del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Dunia de Martini Romero, señaló que es común que los varones se resistan a acudir al psiquiatra por prejuicios sociales, a poner en peligro su trabajo, oportunidades de ascenso u otros beneficios; a perder el respeto de familiares y amigos o su posición en un grupo social.
Los hombres, dijo, interpretan la depresión con malestares físicos, como dolor de cabeza, de articulaciones, colitis, gastritis, estreñimiento y mareos, a diferencia de las mujeres, que la hacen más evidente en su estado de ánimo y vida afectiva.
Un varón con depresión presenta dificultad para concentrarse, disminuye su rendimiento diario, actúa indeciso, tiene aspecto de abatimiento, irritabilidad, retraimiento social, inhibición en actividades físicas e incluso en el habla, pero lo justifica al interpretarlo como cansancio por el exceso de trabajo o de las presiones y sus múltiples problemas.
En la población masculina, la depresión moderada se manifiesta con síntomas frecuentes de ansiedad, en la grave puede haber pensamientos de muerte y/o autodestructivos, celos exagerados e inseguridad extrema.
Precisó la doctora que es común que se den intentos suicidas. Se ha observado que el hombre tiene menos intentos que las mujeres (tres mujeres por cada hombre).
Expuso que el uso y abuso de sustancias como alcohol y drogas ilegales es muy frecuente en el hombre deprimido, lo que puede enmascarar aún más su depresión.