México, D.F.- En cada una de sus palabras Juan Díaz de la Torre, trata de poner distancia entre el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) que él encabeza y el que dejó la maestra Elba Esther Gordillo.
Dice que él no será un líder eterno en el sindicato, pues en 2018 cuando termine su encargo se retirará, incluso celebra que esa promesa quede grabada por la cámara y promete que aunque se lo pidieran no se quedaría en la dirigencia. Afirma que sus hijos no tendrán cargos en el SNTE ni en la administración pública municipal, estatal o federal. Sostiene que haber defendido a ultranza a la maestra cuando fue detenida y acusada de delincuencia organizada hubiera significado una profunda miopía y una irresponsabilidad con los maestros de México.
Juan Díaz es cuidadoso cuando aborda el tema de Elba Esther, sin embargo, no duda en ir directo cuando se tocan dos temas: la presencia de la familia de la ex lideresa en el sindicato y las relaciones con los partidos políticos. “Ellos no son miembros del sindicato”, dice para explicar que los familiares de Gordillo no tienen hoy en día ninguna presencia dentro del SNTE. “El Partido Nueva Alianza no es de la maestra”, es de los maestros, sostiene.
El presidente nacional del SNTE dice que los maestros de México están con la reforma educativa y favor de una evaluación, pero siempre y cuando haya una inversión de recursos para la capacitación pertinente, la formación continua, la actualización los profesores y trato digno. Añade que el sindicato no defenderá a los docentes que se nieguen a ser evaluados.
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