Córdoba.- En Veracruz, no se ha logrado descubrir ni la cuarta parte de fosas clandestinas que existen a lo largo de todo el territorio.
El personal investigador trabaja sin recursos, y eso ha afectado la misma entrega de resultados y dictámenes de los hallazgos. Un ejemplo, es el caso de la fosa ubicada hace un año en Ixtaczoquitlán y recientemente en El Barreal.
De acuerdo con integrantes del Colectivo de Familiares de Desaparecidos Córdoba-Orizaba, en el caso de la fosa de Ixtaczoquitlán, misma que fue ubicada en un predio propiedad de un exfuncionario, no se ha hecho entrega del dictamen pericial de lo que ahí se ha encontrado. Derivado de ello, la denuncia en contra del propietario del lugar sigue detenida.
Lo mismo ocurre en el caso de la fosa localizada en El Barreal, donde tampoco se ha emitido un informe sobre los hallazgo en la zona. Pues, pese a que ha empezado a ver un poco más de fluidez en la información, la falta de recursos para procesarla mantiene limitados los procesos tanto de identificación como de entrega de restos.
Los avances más recientes, como fue en la fosa de Atzacan, se lograron debido a que los cuerpos aún estaban identificables. En este caso se trata de procesos diferentes a aquellos donde se ubican restos calcinados o de mucho tiempo.
Por lo que urgieron a las autoridades el desarrollo de las investigaciones, sobre todo al considerar que siguen surgiendo nuevos lugares de búsqueda.
Sin precisar una cifra, se asegura que en Veracruz no se ha descubierto ni la cuarta parte de las fosas clandestinas de restos humanos, ya que cada vez son más las pistas y ubicaciones que se reciben de forma anónima.
