Cd. Mendoza.- Al menos 250 familias de la colonia Rincón Santa Rosa temen que el río Blanco se desborde y queden incomunicadas, por la falta de construcción de un muro de contención que se partió desde 2012, y que pese a solicitarlo a las autoridades no les han hecho caso.
En entrevista con vecinos del lugar, manifestaron que la barda que hoy está fracturada en medio del río, hace cinco años los protegía del desbordamiento del afluente, sin embargo, se cayó y el cauce del río se amplió, al grado de acercarse más a sus viviendas.
“Con el huracán Ernesto en 2012 se cayó el muro y quedamos incomunicados, y desde ese entonces lo hemos estado pidiendo a las autoridades en funciones y nunca nos han hecho caso, al contrario, sólo vinieron y escarbaron y lo único que ocasionaron es que se ampliara el cauce del río y se derrumbó más ese muro que ahí se ve”, expresó una habitante. Otra vecina, indicó que desde que la compuerta del canal de la exfábrica de San Lorenzo de Nogales dejó de funcionar y quedó abierta, ellos mismos se ocupan de mantener despejada esa estructura para darle salida al agua, ya que de lo contrario se ocasiona un “tapón” y se desborda el afluente impidiéndoles el paso.
Pese al riesgo latente en que viven los ciudadanos en esa zona, lamentó que de las 250 familias que ahí habitan, sólo 10 se dan a la tarea de realizar trabajos de faena.
“Deberían de ver cuando viene la barrancada, nosotras aunque somos mujeres sacamos los troncos y las ramas que tapan la compuerta, porque si la dejamos así nos vota toda el agua y quedamos incomunicados, ahorita si ve está limpio, pero es trabajo de nosotros”, indicó.
