Mariano Escobedo.- Cansados de los malos tratos y la actitud de la directora Ana Evelia Velasco San Juan, padres de familia de la escuela “Niños Héroes” se manifestaron para exigir su destitución.
Reunidos afuera de la primaria, denuncian diferentes anomalías protagonizadas por la Directora, bajo la protección del supervisor de la Zona 10, Juan Miguel Rodríguez, por lo que tras el anuncio de la posible destitución del profesor Carlos Ignacio Rodríguez, cerraron el plantel.
“Porque ya lo traía en salsa desde cuándo, lo que hace es provocar conflictos internos, con la Directora hicieron un complot para que fuera despedido mediante oficios sin argumentos, son sólo chismes y chismes, nosotros los papás ya nos dimos cuenta”, manifestó una madre.
Una de las profesoras mencionó que desde que llegó a ocupar el cargo, el Supervisor ha tratado de hacerle pesada la vida laboral debido a que fue secretario general, “siempre le obstruyó sus cosas chuecas, entonces le agarró odio y como ya salió del encargo, ahora lo está presionando para sacarlo de la escuela y de la zona”.
Entre las irregularidades está el de proteger la holgazanería de la intendente Irasema Gómez, a quien la Directora defiende a capa y espada de quienes la quieren reprender, dicha persona no hace su trabajo y “se la pasa pegada a la Directora, van al café juntas, a la tienda juntas, desayunan y se van juntas”.
Mencionaron que además del sueldo que cobra la intendente, da clases de vals en un preescolar cercano, y también a los alumnos de la escuela, desatendiendo sus obligaciones y cobrando por alumno 30 pesos, mientras que la Directora no dice nada, por lo contrario la defiende.
Al lugar llegó el supervisor de la Zona 106, Juan Miguel Rodríguez y quien reprendió a los padres de familia por cerrar la escuela, les aclaró que en ningún momento se estaba despidiendo al maestro, sin embargo, si se le está haciendo una investigación.
Además, a toda queja de los padres de familia les dio una justificación, mientras el grupo le manifestó sus inconformidades y que van desde que todo el personal desatiende a los menores, porque aseguran que no es su obligación estar pendientes de lo que hacen en el recreo.
Otra persona, dijo que en alguna ocasión “vine a hablar con una maestra porque a mi niño le bajaron los pantalones ¿y qué dijo la maestra? No es mi responsabilidad, no es mi hijo, si él sale al recreo es porque se sabe cuidar, a mí no me diga nada, usted le debe de decir al niño y no se venga a quejar conmigo. Y no han dicho nada al respecto”.
“Toman café en horario de trabajo, si a mi niño lo mando bien desayunado, ellos debería hacer lo mismo, mi trabajo es cuidarlos, pero no, ellos se encierran en sus salones, cuando los buscamos nunca están y los niños en las bardas, jugando o pidiendo la pelota”, resaltó una señora, mientras el resto decía: “si cambia a este profesor, se cambia a todos”.
El asunto no llegó a nada en concreto, porque empezó a llover.