Por:Andrés Timoteo / columnista
La democracia francesa, una de las más antiguas del mundo, sigue dando lecciones a todos. Ayer domingo se realizó la segunda vuelta de votaciones para renovar la Asamblea Nacional –la Cámara de Diputados- y los resultados son inéditos: el partido de nueva creación La République en marche! (La Republica en marcha, LREM) –surgido del movimiento En Marche!, que llevó a Emmanuel Macron a ganar las elecciones presidenciales hace un mes- obtuvo lo que en México se conoce como ‘carro completo’.
De los 577 escaños legislativos, LREM ganó 361, es decir, que el partido del presidente Macron controlará el 62.5 por ciento de la Asamblea Nacional. La mayoría absoluta, pues, y eso le permitirá desarrollar su programa de Gobierno –con las modificaciones legales que requiera- sin mayor problema. La derecha francesa representada por Les Républicains (Los Republicanos) ocupará sólo 126 curules.
La izquierda con el Parti Socialiste (Partido Socialista) ganó 46 escaños, la extrema izquierda tendrá 26 escaños -La France insoumise (La Francia insumisa) 16 y el Parti Communiste (Partido Comunista) 10- y la extrema derecha representada por el Front National (Frente Nacional), sólo ganó 8 lugares. Los diez lugares restantes fueron obtenidos por partidos pequeños como Les Verts (Los Verdes, ecologistas), Resistons (Resistamos) y Mouvement Démocrate (Movimiento Democrata), entre otros.
El domingo 8 de junio fue la primera vuelta de las elecciones parlamentarias y sus resultados anticipaban las cifras de ayer: LREM se impuso en 400 distritos -39 escaños más que lo que se obtuvo ayer-. Ya se perfilaba el triunfo del partido en el poder y lo destacable es que fue la “ola” de influencia de la victoria de Emmanuel Macron un mes antes, el 7 de mayo. Los franceses le dieron un respaldo absoluto a su nuevo mandatario que llegó por un movimiento político diferente a los partidos tradicionales.
Y ahí está la segunda lección: los electores galos de nueva cuenta repudiaron a partidos de siempre y también fracturaron el bipartidismo que dominó las últimas décadas con Los Republicanos –que antes del 2015 era llamado como Unión por un Movimiento Popular (UMP) – y el Partido Socialista. A ellos los mandaron a la segunda y tercera posición, y entre ambos apenas si tendrán el 29 por ciento del parlamento, la mitad que el partido presidencial.
Cabe destacar que desde hace 30 años, el sistema electoral francés eliminó a los Diputados Plurinominales. Los que llegan a la Asamblea Nacional son votados directamente por la ciudadanía, cada Legislatura dura 5 años y los parlamentarios pueden reelegirse varias veces, por lo que sus electores califican su desempeño en las urnas. En Francia no hay Diputados premiados sin sufragio, lo que en México –y en Veracruz- son tremendos parásitos.
Una tercera lección es que el Partido Socialista (PS) del presidente saliente, François Hollande se desplomó estrepitosamente. Sólo alcanzó 46 escaños, el 7.6 por ciento de la Asamblea Nacional, cuando en las elecciones del 2012 obtuvo 333 curules, el 57 por ciento de la votación. El PS es el más castigado por los franceses, quienes repudian a Hollande quien fue el presidente más impopular que se haya tenido en la V República.
La cuarta enseñanza tiene que ver con la extrema derecha y la extrema izquierda. El pro-nazi Frente Nacional sólo ganó 8 curules, que son seis más que las obtenidas en las elecciones del 2012, lo que significa que creció ínfimamente y que los franceses no quieren a la derecha extrema haciendo leyes, aún cuando la dirigente de ese partido y excandidata presidencial, Marine Le Pen fue electa diputada por la circunscripción Pas-de-Calais. La Francia Insumisa de extrema izquierda que salió victoriosa en 16 distritos, seis más que en el 2012 cuando se llamaba “Frente de Izquierda” y obtuvo sólo 10 curules.
El propio dirigente de La Francia Insumisa, Jean-Luc Melenchon –una especie de Andrés Manuel López Obrador galo- resultó electo como Diputado por el Distrito de Bouches-du-Rhône y su partido tendrá una bancada legislativa por vez primera en la Asamblea Nacional. Es decir, la extrema izquierda resultó ganadora al final de cuentas y la figura de Melenchon se mantiene como un referente de alternativa política.
Finalmente, la quinta enseñanza para todos los que en México, y sobre todo en Veracruz, se quejaban del abstencionismo en los comicios del 4 de junio que fue del 41 por ciento –votó el 59 por ciento de los electores-, la participación electoral en Francia fue de entre 43 y 44 por ciento, es decir, hubo un abstencionismo del 56 por ciento, mayor al de la segunda vuelta del 2012 cuando éste fue del 45 por ciento. Aun así, el sistema electoral funciona con los que acuden a las urnas. La democracia es imperfecta, sí, pero democracia al fin, y como dice el clásico: se debe jugar con las canicas y las reglas que se tienen. Ni lamentarse ni mandar al diablo a las instituciones, como pregonan muchos.
LA LUMBRE EN
LOS APAREJOS
En temas locales, hay buenas noticias para todos los veracruzanos: la justicia Federal llamó a cuentas al impresentable exgobernante estatal –no Javier Duarte, quien ya está en una cárcel de Guatemala, sino su innombrable antecesor- por el caso de los sobornos recibidos por la empresa brasileña Odebrecht para recibir concesiones para realizar infraestructura en la industria petroquímica, hídrica y la operación de sistemas de agua potable. La lumbre está por llegarle a los aparejos a ese oscuro y siniestro personaje, de quien se dice ya huyó del País para evadir una posible orden de captura.
A finales de la semana pasada se conoció que la Procuraduría General de la República (PGR) tiene al innombrable en una investigación junto con Duarte de Ochoa; Jordy Herrera, exdirector de Pemex Gas; el exsecretario de Economía, Bruno Ferrari; los exdirectores de Pemex, Juan José Suárez Coppel y Emilio Lozoya, así como el expresidente Felipe Calderón, quienes habrían recibido sobornos de Odebrecht para otorgarle el contrato de construcción de varios proyectos, el más grande, el complejo petroquímico de Etileno XXI en Minatitlán, al Sur de la Entidad.
Hay que recordar que el innombrable amarró ese y otros tratos con Odebrecht en el 2010, el último año de su Gobierno, y que fueron facilitados por Duarte de Ochoa para que los negocios transexenales continuaran en beneficio de su antecesor. No hay que olvidar que éste creó empresas con prestanombres que a nivel local se asociaron con Odebrecht para obtener beneficios en varias concesiones.
La más descarada fue la concesión leonina por 30 años para operar el sistema de agua potable en la conurbación Veracruz-Boca del Río-Medellín de Bravo, donde irregularmente fue desaparecido el organismo intermunicipal Sistema de Agua y Saneamiento (SAS) y se creó el Grupo Metropolitano de Agua y Saneamiento (MAS) integrado por Odebrecht, la española Aguas de Barcelona y una sociedad mexicana. Ahí el negocio es la facturación anual por más de 800 millones de pesos que tiene el sistema de agua potable.
Por cierto, el primero en caer luego de que se supo que el innombrable está bajo investigación por los sobornos de Odebrecht, fue su personero Arturo Zorrilla Castañeda, al que había colocado como director del Grupo MAS y quien intempestivamente dejó la encomienda de vigilar el negocio de su patrón. Zorrilla Castañeda, es, junto con el alcalde porteño, Ramón Poo Gil, de los que defendieron con uñas y dientes la concesión leonina a las empresas transnacionales Odebrecht y Aguas de Barcelona.
Así pues, Zorrilla es el primero en huir, pero vendrán más, pues en el asunto hay muchos embarrados, incluyendo al mismo edil Poo Gil y a varios Diputados Locales. Uno de ellos, es el actual titular de la Secretaría de Desarrollo Económico y Portuario, Alejandro Zairick, quien siendo presidente de la Comisión de Desarrollo y Fortalecimiento Municipal pudo frenar la concesión por treinta años que se le otorgó a Odebrecht.
Extrañamente el exdiputado panista no lo hizo pese a que tenían conocimiento de las irregularidades –las cuales hoy señalan sus mismos sucesores del blanquiazul en el Congreso Local- y que detrás de ese chanchullo estaba el innombrable. No lo hizo porque fue parte de la cadena de corrupción, ya que habría recibido un soborno millonario para dejar pasar el asunto. Entonces, las coimas de Odebrecht también alcanzaron a los azules de la aldea.
IBAN POR EL HIDROSISTEMA
Además del SAS en Veracruz-Boca del Río-Medellín, la intención de los fidelistas era entregarle otros tres sistemas de agua potable a Odebrecht. Ellos son el sistema de agua potable en Coatzacoalcos, proyecto llevado por el exalcalde del lugar, Marcelo Montiel, quien también desde hace tiempo tiene intereses inmobiliarios en Brasil. Montiel era el impulsor junto con su sucesor en el Ayuntamiento sureño, Marcos Theurel Cotero, también exsecretario de Comunicaciones con el innombrable, de entregar en concesión el sistema municipal de agua potable en Coatzacoalcos a Odebrecht.
Tampoco al xalapeño Américo Zúñiga le dio tiempo para transferir la Comisión Municipal de Agua y Saneamiento (CMAS) al corporativo brasileño, al igual que se quedó paralizado el proyecto para entregarle el Hidrosistema de Córdoba a Odebrecht, asunto del que estaba encargado de operar el exsubsecretario de Finanzas y actual diputado local, Juan Manuel del Castillo. Esos tres organismos de agua potable tienen una facturación de 860 millones de pesos anuales, casi similar a los ingresos del extinto SAS que acumula 820 millones de pesos.
En esos tres municipios, el innombrable y sus socios brasileños quisieron hincarle el diente a un negocio que le allegaría al menos 860 millones de pesos cada año. No lograron concretarlo porqueño les dio tiempo ni las circunstancias –si la gubernatura la hubiera ganado Héctor Yunes en el 2016, seguramente estos negocios junto con las concesiones para construir presas hidroeléctricas seguirían viento en popa-.
Ya no se diga el otro negocio de las presas hidroeléctricas, entregado también a Odebrecht y filiales, entre ellas la de El Naranjal en Amatlán de los Reyes, donde hay una fuerte oposición de los lugareños y la de Zongolica que ya está en funciones. En Jacomulco, la rebelión popular impidió que la empresa brasileña comenzara a edificar una presa en el río Pescados. Todo eso se tendrá que investigar y, en su momento, castigar a los corruptos y corruptores que pactaron sobornos millonarios para hacer negocio con el patrimonio público.
Y claro, lo anterior también impactará en el ámbito político-electoral, pues entre más ladrones estén en la cárcel antes de los comicios del 2018, más votos obtendrá la alianza PAN-PRD que tiene a su principal activo en el gobernador Miguel Ángel Yunes. No olviden que en el 2016, los veracruzanos votaron por un gobernante justiciero. Quien diga lo contrario o pregone que se trata de una “cacería de brujas” o una presunta venganza personal, le miente a la opinión pública.
Los veracruzanos quieren ver en prisión a los saqueadores y votarán por quien les garantice eso. El encarcelamiento del innombrable elevará hasta el cielo los bonos de Yunes Linares y la fuerza política que representa.
