Región.- Los gobiernos locales de Ciudad Mendoza, Nogales y Río Blanco están por concluir y ninguno de los presidentes municipales aterrizó en coordinación con la Comisión Nacional del Agua (Conagua) algún proyecto para el saneamiento del río Blanco, que es el afluente más contaminado de Veracruz y uno de los dos con mayor polución en México.
El presidente del Consejo Intermunicipal de Ambientalistas (CIMA), Graciano Illescaz Téllez, señaló que a siete meses de que culminen las actuales administraciones municipales, ninguna de las tres autoridades analizó la magnitud de lo que representa un río contaminado.
“El río Blanco, incluso es parte de las estadísticas de los ríos más grandes y con mayor contaminación a nivel mundial, es increíble que nuestras autoridades y las dependencias federales no tengan la visión de lo que esto representa, afecta la salud de miles de habitantes de cientos de municipios, al igual que miles de hectáreas de cultivos y todo el entorno”, señaló. Detalló que, aunque las autoridades tienen el conocimiento de que la solución al problema de contaminación en la región es la creación de una segunda planta de tratamiento que capte las aguas de los municipios de la Sierra de Zongolica, del volcán y de algunas empresas que aún vierten sus desechos en el cauce, ninguna la aterrizó en la actual Administración.
Refirió que la falta de una segunda planta ha provocado desde hace décadas que el agua del río no sea apta para consumirla.