Córdoba.- Durante el cuarto mes del presente año se registraron un total de 28 ejecuciones en la región, lo cual ha demostrado la vulnerabilidad de las diferentes corporaciones de la Policía para garantizar la seguridad.
Tan sólo en los cuatro primeros meses del año, se cuenta con una estadística de 65 homicidios adjudicados al crimen organizado en lo que corresponde a Córdoba, Orizaba, Ixtaczoqui-tlán, Amatlán, Yanga, Cuitláhuac, Cuichapa y Omealca.
De acuerdo a los reportes policiales, el 1 de abril fue localizado, entre unos matorrales del lugar conocido como “La Pochota”, el cuerpo del taxista Néstor Heredia Cortés, de 41 años de edad, vecino de Córdoba, el cual tenía cercenadas ambas manos y le faltaban una oreja y un ojo.
Al momento del hallazgo, tenía menos de 48 horas de haber desa-parecido, luego de que una pareja le solicitara un viaje a la Central de Abastos de Amatlán de los Reyes.
Ese mismo día un vendedor de hotdogs, de 50 años de edad, fue ejecutado en un cuarto de vecindad, ubicado en la avenida 10, entre calles 15 y 17, del barrio de San Miguel de la ciudad de Córdoba.
Al siguiente día fueron hallados dos ejecutados afuera de una vivienda ubicada en la localidad de Ocoxotla, perteneciente al municipio de Mariano Escobedo, los cuales se dijo se dedicaban a la extracción ilegal de combustible.
El 4 de abril un joven de 23 años de edad, vecino de la congregación Buena Vista, en Cuichapa, fue ejecutado a balazos por sujetos desconocidos cuando viajaba a bordo de su motocicleta junto con su esposa sobre la carretera estatal Amatlán-Cuichapa, a la altura de la congregación Los Ángeles.
Ese mismo día fue encontrado un sujeto, de entre 35 y 40 años de edad, ejecutado a balazos, apuñalado y con huellas de tortura a orilla de la carretera La Luz Francisco I. Madero-20 de Noviembre, frente a la aeropista Juan Antonio Perdomo Díaz de la ciudad de Córdoba.
El 7 de abril fue encontrado ejecutado otro taxista, identificado como Mario Estrada, de 40 años.
El cuerpo fue localizado en un camino de terracería a la entrada de la comunidad Las Palmas, a unos 100 metros de la carretera estatal San José de Abajo-Omealca.
Al día siguiente, vecinos de la comunidad Fraternidad encontraron entre unos matorrales el cuerpo sin vida de una mujer envuelto en una cobija.
La mujer, asesinada por impactos de bala y torturada, fue identificada como Diana A., de 18 años de edad, quien era vecina de la colonia Zacatepec, de la ciudad de Córdoba, según informes de las autoridades encargadas de tomar conocimiento de los hechos.
Un día después fue asesinado a balazos un albañil, luego de que cuatro sujetos, entre ellos una mujer, lo persiguieran durante varias cuadras hasta una vivienda ubicada sobre la avenida 31, entre calles 23 y 25, de la colonia Aguillón Guzmán en Córdoba.
El alarife respondía al nombre de Israel Román Núñez, de 38 años de edad, alias “Ray”, con domicilio en la colonia San Martín.
El 11 de abril fue ejecutado en la unidad Colinas de San José, casas Homex, el propietario del bar “El Mono ll”, José Antonio Uscanga, de 42 años de edad, en manos de dos sujetos armados que llegaron, le dispararon y escaparon.
DESPEDAZADO
Al siguiente día fue encontrado el tronco de un sujeto dentro de una bolsa plástica, sobre la carretera federal Córdoba-Veracruz, a la altura del libramiento a Yanga. Mientras que la cabeza y los brazos fueron ubicados cerca del libramiento de Cuitláhuac
El 15 de abril un hombre fue encontrado sin vida en un camino de terracería a las orillas de un plantío de café de la localidad de Huatusco, el cual presentaba un orificio en la cabeza y estaba atado de manos y pies.
El 17 de abril un joven de la comunidad de San Miguel fue acribillado a balazos por sujetos armados, quienes lo interceptaron cuando viajaba a bordo de un camión de carga junto con otra persona sobre la carretera que comunica a la localidad de Capulines con Huitzila.
El día 19, las autoridades policiacas y Ministeriales fueron alertadas sobre el hallazgo de una pareja degollada, con señas de golpes y puñaladas, en una habitación de un conocido hotel, ubicado en la calle 16, entre avenidas 2 y 4, de la ciudad de Córdoba; además estaban maniatados.
El 23 de abril el agricultor José Luis Gómez Álvarez, mejor conocido como “El Güicho” Álvarez, cuñado del extinto líder cañero Rómulo Cervantes Andrade, fue ejecutado a balazos en la comunidad Paso del Rosario cuando se dirigía a misa.
Un día después, un hombre que viajaba a bordo de su camioneta sobre la carretera federal Tehuacán-Córdoba fue acribillado por sujetos armados que lo venían persiguiendo desde el vecino estado de Puebla.
NOCHE SANGRIENTA
Al día siguiente, fueron ejecutadas cuatro personas en el interior del bar “La Botana” en Orizaba, entre ellas una mujer, mientras que tres más resultaron lesionadas, luego de que sujetos armados irrumpieron y dispararon contra los clientes que ahí se encontraban, lo que movilizó a efectivos de las diferentes corporaciones policiacas.
Más tarde, ese mismo día, fue ejecutado en la unidad habitacional Arboledas el conductor del taxi número 49, con placas de circulación 9786XCZ, identificado como Clemente Castro Hernández, de 32 años de edad.
Una hora después, fue ejecutado en la calle 34, entre avenidas 11 y 13, Juan Manuel Jiménez Rivera, de 42 años de edad, cuando viajaba a bordo de su automóvil Volkswagen tipo Jetta color blanco.
Al siguiente día fue encontrado ejecutado y semidesnudo, tirado junto a su vehículo tipo Jetta color rojo, con placas del Estado de México, un sujeto de nombre Carlos Alberto R. F., de 22 de años de edad, vecino de Río Blanco.
Ese mismo día un docente fue ejecutado de al menos cinco balazos en calles de la unidad habitacional Loma Linda, lo que provocó la movilización de los cuerpos de emergencia y policiacos.
El sábado 29 de abril fue encontrado ejecutado entre unos matorrales del camino Moyoapan-Chiltepec, en Ixtaczoquitlán, el taxista Rubén Espinosa, de 50 años de edad, el cual fue privado de la libertad durante la madrugada.
Al siguiente día, en la autopista Córdoba-Veracruz, fue encontrado ejecutado, sin manos y amarrado de ambos pies, un sujeto de unos 25 a 30 años de edad.
Más tarde, a la altura del kilómetro 14 de la carretera federal Córdoba-Veracruz, en la entrada a San José del Corral, en Yanga, fueron localizadas dos bolsas de plástico color negro, las cuales contenían en su interior un cuerpo descuartizado.