Atoyac.- En el cumplimiento de su deber falleció el elemento de Seguridad municipal, Rigoberto Tapia Vargas, quien mientras laboraba sufrió un infarto fulminante que le quitó la vida durante la madrugada de ayer lunes, en la cabecera municipal, a quien sus compañeros rindieron una guardia de honor.
El difunto, Tapia Vargas, se encontraba realizando rondín en las calles aledañas al Palacio municipal de Atoyac, cuando se presume sintió un dolor intenso en el pecho y se sentó, los vecinos o personas que lo vieron pensaron que estaba durmiendo y fueron a verlo, pero se percataron que no respondía; ya carecía de signos vitales.
Las autoridades tomaron conocimiento y reportaron a la familia lo sucedido; la esposa del infortunado elemento policiaco manifestó que “él me aviso que desde hace tres días le dolía el pecho, que le daba un dolor”, pero de esta situación el uniformado no informó a su jefe inmediato, ni solicitó atención médica y se encontraba laborando normalmente.
Tapia Vargas falleció cerca de las 02:00 horas del uno de mayo, a la edad de 49 años, dejando a tres pequeños en la orfandad y su esposa. Las autoridades tomaron conocimiento y determinaron una muerte patológica por infarto fulminante. A las 13:47 horas el cuerpo del policía cuarto arribó a la Comandancia de Seguridad Pública, donde sus compañeros le montaron una guardia de honor.