CUITLÁHUAC.- En un mes el limón persa pasó de 300 a 100 pesos la caja en el campo, debido a la sequía y al robo del cultivo obligó a los productores a cortar un producto pequeño, expresó el presidente nacional del Sistema producto limón persa, César Cortés Bello.
“Se esperaba una alza de precio si se mantenía el no cortar el calibre de piezas pequeñas, pero durante la Semana Mayor los limoneros se descontrolaron cortando, por temor a que se asentará una sequía pues se vive una falta de agua que no permite se desarrolle el producto”, expresó el líder.
Los limoneros cortaron diversidad de tamaños desde los denominados canina, torreones y calibre 150, por ello el precio que era de 300 y 200 pesos disminuyó a 100 pesos en estas fechas.
“Esperamos que el precio repunte, pues esta semana cayeron dos lluvias, pero las nubes se han quedado en algunas zonas y en otras no ha llovido”, indicó.
La falta de lluvias ha afectado a los productores, porque el cultivo requiere de agua para que el limón cuente con la humedad y el tamaño necesario. Tan sólo una huerta de este fruto requiere al menos el 80 por ciento de agua.
Las áreas más afectadas son la de Carrillo Puerto, las faldas de los cerros, Tierra Blanca y Cotaxtla, porque en muchos casos hay poco o nulo riego para sus cultivos.
Lo que aunado al robo que se ha registrado principalmente por las noches del limón, ocasionó que los productores cortaran las piezas a destiempo o perderían su sustento.
