Córdoba.- En el 2014, Tomás@elalcahuetedePortillayLavín, anunció que la obra constaría de cuatro etapas y en cada una se invertirían 20 millones de pesos.
En el último año de su gobierno, sólo ha concluido la primera a un costo de 38 millones de pesos. En tanto, la segunda ya la asignó por 31 millones de pesos… y aún no han puesto ni un ladrillo.
Además de haber rebasado por mucho el precio licitado para la primera etapa, a Tomás y su grupo de secuaces no les alcanzó el dinero. La segunda etapa ya superó los 11 millones de pesos por encima de los 20 millones programados, todo porque las constructoras que contrató, entre ellas la de su amigo Hugo Fernández, en sociedad con Guraieb y Asociados, están coludidos con él para inflar los precios y robarse el dinero.
¡A esto se le llama corrupción!
Como los puentes para el paso del tren y el periférico, la remodelación del Mercado fue otra promesa incumplida de Tomás, ofrecida como presidente electo.
La obra, asignada a la empresa Ingeniería y Arquitectura en Servicios para la Construcción SA de CV, inició mal, pues la primera etapa debía concluir el 15 de diciembre de 2014, lo que no se concretó. Supuestos inconvenientes técnicos fueron utilizados como pretexto para subir el costo de la obra.
De ahí, el alcalde y la Dirección de Obras Públicas comenzaron a manejar que la primera etapa constaba de dos fases. El 16 julio de 2015 le otorgaron a Refa Construcciones la “segunda fase de la primera etapa” por un monto de 18 millones 446 mil 128.71 pesos.
Esa “segunda fase de la primera etapa” también presentó numerosos “contratiempos” que alargaron la duración de la obra: deficiencias, derroche de recursos, así como protestas de locatarios porque el Gobierno no les cumplió con lo prometido. Finalmente, el 30 de noviembre de 2015 la primera etapa quedó concluida, pero los locatarios no pudieron ocupar sus locales de inmediato y, hasta la fecha, el estacionamiento no funciona -y ha tenido que ser reparado- ni el montacargas.
En total, la primera etapa tuvo un costo de 38 millones de pesos, es decir, 18 millones de pesos más que lo anunciado, casi el doble.
No contento con este atraco monumental, el alcalde licitó y otorgó a Guraieb y Asociados la segunda etapa de la obra por 31 millones 582 mil 157.97 pesos, es decir, 11 millones más de lo que había anunciado que costaría la rehabilitación del área de carnicerías, bodegas y alacenas. Esa constructora orizabeña está acusada de corrupción en Puebla por haberle regalado a la excandidata priista a la gubernatura de aquel estado una casa de más de 7 millones de pesos en el fraccionamiento La Misión, como pago por los 29 contratos de obra pública que ésta les otorgó con valor de 61 millones de pesos cuando fue la presidente municipal de Puebla. A pesar de existir un sinnúmero de constructoras locales, Tomás apostó por dicha empresa, que según Obras Públicas, fue la que ofreció las mejores condiciones económicas y las más apropiadas para el Ayuntamiento, seguramente las mismas que le fueron a ofrecer a la exalcaldesa poblana para ser merecedores de millonarios contratos.
El monto asignado a Guraieb y Asociados es de más de 31.5 millones de pesos, la cual debió iniciar tareas el día 23 de junio. El 23 de diciembre es la fecha límite para terminar esta etapa, aunque ya se dijo que podrían pedir una extensión de plazo y en caso de no cumplirse, podría generarse una sanción contra de dicha constructora. La asignación de la obra fue otorgada el 22 de junio de 2016, es decir, lleva más de nueve meses de atraso, pues hasta hoy no ha iniciado.
¿Yunes, y para estos rateros no habrá todo el peso de la ley?
