Nueva York.- Estados Unidos aseguró que está preparado para “hacer más” en Siria tras su primer ataque contra el régimen de Damasco, pero confió en que no sea necesario.
“Estados Unidos tomó anoche (antier) un paso muy calculado. Estamos preparados para hacer más, pero esperamos que no sea necesario”, dijo la embajadora estadunidense ante la ONU, Nikki Haley, en un discurso ante el Consejo de Seguridad.
Ayer las Naciones Unidas organizaron una sesión de emergencia por el ataque aéreo del Gobierno de Donald Trump contra la base militar de Homs, en Siria. Al respecto, el secretario de la ONU, Antonio Gutiérrez, llamó a la moderación tras el ataque de Estados Unidos contra el régimen de Damasco, y subrayó la necesidad de buscar una solución política a la guerra que desgarra a Siria.
KREMLIN RESPONDE
El ataque estadounidense causó fuerte daño a las relaciones entre Moscú y Washington, afirmó el portavoz de la Presidencia rusa, Dmitri Peskov, quien dijo que “lo importante es que esa acción, a juicio de (Vladímir) Putin, no nos acerca a la meta en la lucha contra el terrorismo, sino se erige en un obstáculo”.
SIRIA
Por otro lado, el Gobierno sirio calificó el ataque como “una conducta temeraria e irresponsable” de la cual habrá consecuencias, advirtió.
Confirmaron los daños a la base aérea y tras una exhaustiva revisión, el mando militar señaló que el ataque causó afectaciones a la base, de manera directa a los suministros y las zonas de seguridad de Al-Shayrat. Destacaron la muerte de nueve civiles, entre ellos mujeres y niños, como lo dieron a conocer los medios sirios.
Protestas
“Detengan la guerra en Siria” fue el lema de las protestas que se desarrollaron en Nueva York, Londres y Bolivia, ante los ataques con misiles de Estados Unidos.
La Coalición Alto a la Guerra condenó la decisión de Donald Trump de lanzar ataques contra objetivos sirios. “Esta acción sólo aumentará el nivel de matanzas en Siria e inflama la terrible guerra que ya ha causado sufrimiento”, denunciaron.