A 17 días de que concluyan las campañas y 21 días de que los electores acudan a las urnas a elegir a los que serán para los próximos tres años diputados en el Congreso Local y para los próximos cuatro años alcaldes, síndicos y regidores. Lo lamentable, desde mi muy particular punto de vista, es que estas campañas se han distinguido por la descalificación, amenazas, inmediatez y el otorgamiento de dádivas a algunos electores; sin embargo, se han percibido campañas, la gran mayoría, ausentes de compromisos soportadas en las necesidades que apremian en los diferentes municipios que conforman la geografía veracruzana.
Escucho, leo y veo, que la mayoría de candidatos ofrecen más pavimentación, alumbrado público, plantas de tratamiento de aguas, limpia pública eficaz; y debido a la demanda reiterativa de la ciudadanía, también ofrecen fortalecimiento de los sistemas de salud y el campo, seguridad pública y empleo. No obstante, los cuatro primeros temas son conceptos que ya deben existir en cualquier administración municipal, los cuatro últimos son temas, son políticas públicas que deben garantizarse desde el gobierno estatal y federal.
Debemos conocer que del presupuesto asignado desde la Federación al Estado y sus municipios son alrededor de 90 mil millones de pesos. De los cuales, el 18% es asignado proporcionalmente a los 212 municipios que conforman la geografía estatal; esto es, más o menos se les asigna $ 16,200 millones de pesos. Si esta cantidad se aplicara parejo entre los 212 municipios, luego entonces se les asignaría la cantidad de $ 76’615,094.33 pesos anuales, reitero, si esta cantidad se aplicara proporcionalmente; sin embargo, no es así, tenemos que de los 212 municipios que conforman la geografía veracruzana, 84 son los de mayor población y 128 los de menor población, de acuerdo al pacto federal la distribución económica es de mayor a menor población, así como su influencia económica. Si a ello se le suma que de estos 84 municipio 30 son con la mayor población y económicamente los más importantes, podemos observar cómo la distribución económica es además de desproporcional, discriminatorio.
Si a eso se le agrega que de lo que reciben los municipios veracruzanos el 80% se aplica en sueldos para la burocracia, viáticos, sobresueldos y aviadores entre otros y tan sólo el 20% se aplica al desarrollo del municipio, aunado a que si esto que se aplica se dirige a obra pública, los constructores deben dar al alcalde o a sus achichincles desde el 10 hasta el 20% de regalías por haberles otorgado la obra. Esto quiere decir, si acaso, al desarrollo del municipio se aplica escasamente el 5% de las participaciones que recibe un municipio. Por lo tanto es muy difícil fortalecer acciones gubernamentales que den resultados en el corto plazo a favor del pueblo.
Si a todo ello se le suma que tres partidos políticos (PAN, PRI y PRD) que estarán en la próxima jornada electoral, pareciera ser que lo único que les interesa es mantenerse en el poder cueste lo que cueste, es por ello que la descalificación permanente entre unos y otros es lo distintivo, asimismo están más preocupados con entregar dádivas de todo tipo, promesas y trampas electorales en puerta, con todo ello, se puede observar con toda claridad que lo que desean es seguir mintiéndole al electorado y estar en el poder cueste lo que cueste.
Por lo tanto las ofertas de campaña se vuelven incumplimiento en acciones de gobierno. Ahora bien, Si las próximas autoridades municipales invirtieran la aplicación de recursos, esto es, el 80% a favor del desarrollo del municipio y si acaso el 20% dirigido a la burocracia, viáticos, sobresueldos y aviadores entre otros, el desarrollo del municipio se percibiría, si a ello se le aumenta planeación, una autoridad honorable y que se aboque a gestionar recursos estatales, federales e internacionales, luego entonces se tendrían municipios en desarrollo permanente.
Por lo tanto es tiempo de que la ciudadanía, por lo menos la mayoritaria, la que desea una mejor y mayor calidad de vida acudan a votar por aquel candidato que está identificado como gente honorable y que sustentó su campaña en propuestas viables, será un voto por un cambio real. Los actores políticos corruptos que aspiran a seguir ganando con los votos mayoritarios, soportados en excesiva publicidad, el acarreo apuntalado por las dádivas y promesas que no cumplirán, esa es su mejor propuesta, si continúan ganando así, luego entonces el desarrollo de nuestros municipios y sus habitantes deberá seguirá esperando. En el próximo artículo expresaré lo que debe hacer un diputado y no lo que hace actualmente. ¿Usted qué opina?