Una guapa chica es Rosa Elena Pereyra Hernández y justo este fin de semana cumplió sus quince años.
Como acto de fe, ella acudió a la Capilla de las Madres Guadalupanas para agradecer al Altísimo el permitirle disfrutar de tan esperada fecha, ya que para todas las jovencitas de su edad es un acontecimiento muy importante.
Sus papis Ricardo Pereyra Melgar y Blanca Hernández de Pereyra, la acompañaron en todo momento y con gran devoción escucharon el mensaje que el sacerdote ofreció en honor de Rosa Elena y para sus seres queridos que la acompañaron en esta ceremonia religiosa.
El sacerdote Humberto Jiménez fungió como padrino de la debutante y se comprometió en ser siempre si guía espiritual
Al culminar la misa, la quinceañera se trasladó en compañía de sus papás y seres queridos hasta un bello salón de esta ciudad, pues justo en ese lugar es en donde se llevaría a cabo una gran celebración en honor a ella.
Para iniciar con esa gran velada, la debutante bailó con sus apuestos chambelanes los tradicionales vals que se acostumbran en este tipo de eventos sociales.
Acto seguido, Rosa Elena y todos sus invitados degustaron un delicioso banquete que se mandó a preparar especialmente para esta noche y este fue acompañado con un delicioso vino espumoso, el cual sirvió para brindar por su felicidad.