Orizaba.- Para la Iglesia Católica no es negociable el respeto de la vida, por lo que el aborto, la eutanasia y otros elementos en torno al final de la existencia, son contrarios a la enseñanza de Dios, señaló el obispo de la Diócesis de Orizaba, Eduardo Cervantes Merino, al manifestar que es grave el desorden que se vive ante los casos de inseguridad, violencia, asesinatos y secuestros, entre otros.
“Es el desorden que tenemos y puede ser que se justifique en algunas personas esos actos de violencia y he escuchado que dicen que es por la carencia de trabajo, que no hay oportunidades para los jóvenes y todo eso influye, pero no lo justifica”, resaltó.
Consideró que se trata de una situación que a todos les toca, ya sea en la familia o en el Estado y en las estructuras de la evangelización de la Iglesia Católica, “buscamos medios para que valoremos la vida y nos eduquemos en los valores, a cada quien en lo que toca, es decir, si yo soy Gobierno, Estado, tengo que buscar todas las estructuras para una vida digna y para que se respete, que las leyes no solamente estén escritas, sino que se lleven a la práctica para que podamos tener orden y respeto entre todos, que nos den la garantía del Estado de Derecho”.
Sin embargo, resaltó que a la familia y de manera independiente, le corresponde a cada uno actuar empezando desde el cuidado de la salud, “dentro de la pobreza y los límites que tenemos, de comer sano, que tanto la mamá se preocupe por darles un alimento saludable, además del respeto que nos damos en la casa, ¿nos gritamos, nos ayudamos, nos valoramos, nos queremos como hermanos?”, insistió.
En el marco de la 25 Jornada Mundial del Enfermo, instituida en 1992, indicó que constituye una ocasión para prestar especial atención a la situación de los enfermos y de todos los que sufren en general, para que se renueve en la Iglesia la fuerza espiritual, “para poner la gracia de Cristo en la oración, para que en medio de toda esta situación se refugien en la Virgen María, modelo de abandono a la voluntad de Dios y para pedirle que nos acerque a todo eso”.
Agregó, sobre el mismo tema, que “el asombro ante las obras que Dios realiza: el Poderoso ha hecho obras grandes por mí, por ello es importante que se recuerde que en el mensaje de Jesús siempre se ha tenido la oposición en el mundo, porque se opone a sus proyectos, la Iglesia es discípula y misionera, si nos vemos en dificultades para vivir esos principios y valores, que nada nos lo impida, porque ante una sociedad sin Dios la Iglesia dice que solamente nos podemos apegar a esos valores siguiendo al Señor de la Vida”.