RÍO BLANCO.- En el Hospital Regional de Río Blanco y en algunas clínicas públicas de la región, aún se comete violencia obstétrica en contra de las mujeres de las localidades rurales, antes y después del embarazo. Así lo dio a conocer la agrupación social Por la Igualdad de Género, quien indica que capta en promedio de ocho a 12 casos de mujeres a las que les han colocado algún método anticonceptivo sin su autorización.
El representante de esta organización social, Humberto Dorantes Herrera, resaltó que el problema principalmente lo enfrentan mujeres originarias de Soledad Atzompa, Xoxocotla y La Perla, que desconocen sus derechos y cómo defenderlos.
Recordó que la violencia obstétrica es el maltrato del que es víctima la mujer embarazada al ser juzgada, atemorizada y afectada de forma emocional, al igual que también el hecho de no ser respetada en sus decisiones de procrear después del parto, con la imposición arbitraria de algún método de planificación familiar.
“Esto sigue siendo un problema muy recurrente que se comete en los hospitales y clínicas de la zona, en contra de las personas que tienen dificultad para defenderse, este tipo de violencia está tipificada ya como delito, porque es una falta muy grave a los Derechos Humanos”, expresó.
Detalló que de los casos que han captado de mujeres violentadas de esta forma, ninguna ha procedido a interponer alguna denuncia formal en instancias impartidoras de justicia, esto porque al momento de sufrir la vejación no saben que son víctimas de un delito por parte de los médicos y enfermeras.
Dorantes Herrera, acotó que las mujeres de la zona rural deben saber que el Código Penal Federal contempla la violencia obstétrica como un delito y establece sanciones que van desde tres hasta diez años de cárcel a los trabajadores del sector Salud, que violenten el derecho de toda mujer a elegir cuántos hijos desean tener y en qué lapsos de tiempo.
“Hemos captado casos en el Hospital Regional de Río Blanco y en unidades de la Secretaría de Salud, en donde por cumplir con las metas de los métodos anticonceptivos como el DIU, el personal los coloca sin el consentimiento de los pacientes. Hay que recordar que nuestro Artículo 4 de la Constitución nos concede el derecho a la igualdad y a la libertad de decidir cuántos hijos queremos tener y el espaciamiento entre ellos”; pidió a las mujeres que denuncien estos hechos.
