Córdoba.- Al menos veinte trabajadores del volante, se manifestaron a las afueras del parque ecológico Paso Coyol, a fin de demostrarle al gobernador del estado, su inconformidad ante la probable introducción del taxímetro.
Sistema de cobro, que actualmente forma parte de un programa piloto, en el que participan cien taxistas, y que argumentaron los quejosos sólo representan pérdidas económicas más que ganancias.
Los taxistas de Córdoba y Orizaba, entregaron al Mandario estatal parte de sus demandas, en donde destacan que sólo se trata de un negocio redondo para los dirigentes, quienes al parecer recibirán una fuerte comisión por cada taxímetro instalado, tal es el caso del dirigente Antonio Fernández Morales.
Los quejosos también exigieron un acercamiento con las autoridades de Tránsito del Estado, para pedirles la realización de un estudio socioeconómico para la instalación de los taxímetros, para con ello, comprobar que no funcionarán en la zona centro.
Otro punto para rechazar el taxímetro es el caos vehicular que existe en la región, no sólo de Córdoba, sino también en Orizaba, aunado al sinnúmero de obras en ejecución, por lo que reiteraron que el taxímetro no es conveniente ni para los ruleteros ni para el usuario.
“Imaginen si me encuentro en un embotellamiento como los que suele suceder, o se nos atraviesa el tren y que el taxímetro siga corriendo, la tarifa mínima es de 16 pesos y con este aparato imagínese cuánto va a pagar el usuario”, concluyó.
Ricardo Jàcome Zavaleta
El Buen Tono
