Orizaba.- El reino de Jesús confronta y descalifica a los hombres con cotos de poder, que quieren seguir explotando a la población, como el Rey Herodes, quien quería ponerse en contacto con Jesús, pero para eliminarlo, por lo que es descalificado ante Dios y la Iglesia, detalló el vocero de la Diócesis de Orizaba, Helkyn Enríquez Báez.
Señaló que los hombres con poder no quieren saber nada de Jesús, pues muchas veces ya se han apoderado de zonas de confort y de poder, las cuales no quieren dejar y ese precisamente es el mensaje de la Fiesta de la Epifanía, reconocer que aún quedan estrellas en nuestras vidas que nos dan luz y esperanza, signos por los cuales Dios habla, encontrando a Jesús para transformar las vidas.
Sobre las manifestaciones recientes y actos vandálicos protagonizados en diversas ciudades, producto del llamado gasolinazo, destacó que las protestas son lícitas y justo cuando se desarrolla de un modo humano, siendo una premisa para promover los derechos y no socavar los de otros, derecho a la propiedad, a la integridad, al trabajo”.
“La violencia nunca va a causar buen fruto, ésta genera más violencia y ese no es el modo de arreglar los problemas cuando algunos piensan que se está saqueando al País, a nivel micro, cuando en verdad a nivel nacional lo están haciendo”. Comentó que el diálogo es la solución a los problemas de la agenda nacional, los sectores políticos y gobernantes con humildad deben reconocer que las reformas deben ser perfectibles, de modo que se privilegie el bien de todo el País. “Aunque hubo manifestaciones de violencia en otras zonas, es de reconocer que sí se puede mantener el orden y la paz, pues en nuestra ciudad no hubo ese tipo de confrontaciones, sabemos que sí hubo en una plaza intervenciones, pero que de alguna forma sí se puede prevenir el delito”, explicó el presbítero.
Comentó además que el civismo y la ética son materias que si bien se van perdiendo en la familia, el sistema educativo las debe rescatar, para formar un pueblo con valores e individuos de bien, pero es responsabilidad del Gobierno generar ese sistema, además de crear fuentes de empleo digno para un mejor desarrollo social y económico.