Córdoba.- El sector de la construcción se encuentra a punto de colapsar, debido a la situación crítica que enfrenta por el encarecimiento de los insumos, ante el tipo de cambio del dólar, la pérdida de alrededor de 700 empleos y el adeudo de 150 millones de pesos para unos 40 constructores, de los 280 que hay en la zona Centro.
Lo anterior, lo aseguró el delegado de la Asociación Mexicana de Ingeniería y Vialidad Terrestre, AC (Amivitac), Omar Humberto López López, al señalar que el Estado de Veracruz se encuentra en quiebra, ya que no hay obra para ser ejecutada, ni tampoco hay trabajo.
Al referirse a los bloqueos de grupos por el incremento en los combustibles, aseguró que la ciudad de Xalapa fue una de las más afectadas en sus accesos y salidas, donde este jueves sólo se permitía el paso a vehículos pequeños, pero no al transporte de carga.
En este sentido, señaló que la situación para el sector es preocupante, dado que por los bloqueos la maquinaria de traslado se pueda quedar parada en las carreteras, como ocurrió en el caso de la que sería bajada de la Sierra de Zongolica y que se tuvo que quedar en ese lugar.
Mencionó que el adeudo que dejó la Administración Estatal anterior fue de 150 millones de pesos en perjuicio de 40 constructoras, muchas de los cuales presentaron denuncias, mientras que otros hicieron trabajos y algunos convenios. Explicó que la situación es crítica porque actualmente se tienen incrementos en los insumos y materiales, como por ejemplo en la grava, que ha subido un 35 por ciento, la arena otro 25 por ciento y ahora con el gasolinazo se espera que también los “acarreos” sufran incrementos.
Manifestó que cada sector se va a defender desde sus trincheras, “como sucederá seguramente con los materialistas, que tienen que defender la elevación de costos en refacciones y materiales”.
López López admitió que el sector ha sufrido pérdidas millonarias por el incremento al costo del combustible, por lo que el jueves se reunió en Xalapa con el Dirigente Estatal de la Asociacion, a fin de planificar las medidas que habrán de tomar para manifestar su inconformidad, aunque lo que se busca es no afectar a terceras personas.
Agregó que los constructores no necesariamente podrán ampararse, pero si recurrir al tema de las adecuaciones de volúmenes de ajustes de costos, para lo cual se debe esperar el comportamiento de la inflación.
Señaló que debido al efecto dominó es incierto el panorama que se vislumbra en este sector.