CDMX.- Un consorcio que incluye a las mexicanas Cicsa, parte de Grupo Carso, del magnate Carlos Slim, y a la constructora ICA, obtuvo ayer viernes el contrato para construir el edificio terminal del nuevo aeropuerto de la Ciudad de México.
El grupo de Slim, que también incluye a filiales de las empresas españolas Acciona y FCC, presentó la oferta económica más baja entre tres consorcios participantes en la licitación, de 84 mil 828.3 millones de pesos (3 mil 980 millones de dólares), dijo el Gobierno mexicano.
El consorcio ganador está conformado por las sociedades anónimas Operadora Cicsa, Constructora y Edificadora GIA+A; Promotora y Desarrolladora Mexicana; Promotora y Desarrolladora Mexicana de Infraestructura; La Peninsular Compañía Constructora; Operadora y Administración Técnica Acciona Infraestructuras; Acciona Infraestructuras México; FCC Construcción; FCC Industrial e Infraestructuras Energéticas, e ICA Constructora de Infraestructura.
El edificio terminal es la parte central de la nueva terminal aérea y comprende la edificación de una estructura de cuatro niveles; malla y envolvente, así como los acabados del mismo.