Orizaba.- La presidenta del sistema del Desarrollo Integral de la Familia (DIF), María de los Ángeles Pírez de Diez, informó que el estado en el que llegan los niños al albergue La Esperanza es “horroroso”, pues incluso al mes reciben hasta siete casos de violaciones.
“Se dan… a lo mejor en un mes tengo cuatro, como en el otro mes tengo uno, como en el siguiente llegan siete”, manifestó la presidenta del DIF, al señalar que se dan igual en contra de niñas como de niños, porque quien “es malo es malo, con quien sea, cualquiera que sea el género”.
Dijo que las vivencias que sufren los pequeñitos son verdaderamente lamentables, pues en muchas de las ocasiones son bajo el consentimiento de sus madres, ya que el delito lo comete el padrastro, por lo que la intervención del DIF es muy importante para rescatarlos del caos al que se están enfrentando.
“Es horroroso el estado en el que llegan, lo que yo te diga es poco, no te lo puedo decir con palabras, es un daño tremendo, un daño de los cuales muchos quedan marcados el resto de su vida y no se llegan a recuperar”, resaltó.
Con ello, comentó que la campaña de denuncia ciudadana que se está empleando a través del DIF y mediante los números telefónicos 7251980 y 7255101, les ha sido de mucha ayuda, ya que de esta forma se están atendiendo situaciones porque debido al temor de sufrir alguna represalia, la gente no los daría a conocer.
Dijo que afortunadamente se han resuelto varios casos en donde los niños se quedan con sus familiares, pues de más de 20 que tenían al inicio del año ahora sólo tienen 12, en cuanto a los costos de atención, mencionó que la cifra exacta no la podía precisar, porque es variable.
Agregó que “a veces los niños se enferman, llegan tan dañados psicológicamente que debemos tener terapias y no nada más aquí sino en la Ciudad de México, en el Hospital Psiquiátrico Infantil”.
Ya para finalizar, dejó en claro que a pesar de que ha recibido diferentes críticas porque se está actuando en contra de quienes cometen un delito afectando seriamente a un menor, aseguró: “Eso no me importa, voy a seguir siendo muy mala, mi prioridad es que los niños estén bien”, finalizó.