Orizaba.- La situación económica que vive México y la desleal competencia de las importaciones chinas, han dado un tiro de gracia a los talleres familiares de la industria de la confección de prendas de vestir, destacó Gloria Laredo, empresaria del ramo.
Actualmente han desaparecido poco más de 15 talleres dedicados a la hechura de prendas y uniformes en la zona Centro, ante la entrada de vestimentas de baja calidad y menor costo, proveniente de China.
Gloria Laredo, con más de 30 años en la industria, señaló que poco a poco se van perdiendo los empleos y el sector está destinado a desaparecer, por la competencia desleal del ingreso de ropa asiática al País, sobre todo en las zonas libres de Centroamérica. “La ropa que llega por Guatemala está acabando con los empleos en la región, pues cada vez vemos más el comercio informal de prendas en la ciudad, donde se ofertan confecciones extranjeras a precios muy bajos, nada comparables con la ropa que se elabora en la zona y que son de muchísima calidad”, expuso.
La diseñadora, apuntó que debido a esa situación las dependencias de Gobierno, como la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), impulsaron acciones para frenar la entrada de artículos a precios bajos y a la vez, elevar la productividad y competitividad de la industria textil y del vestido de nuestro País, pero que para accesar a esos créditos era muy difícil, pues la facturación debía ser por arriba de 100 mil pesos mensuales para los pequeños negocios, cantidad que no se llega a generar.
Sobre la pérdida de empleos en los últimos tres años, destacó que se han recortado de los talleres casi un 70 por ciento de la mano de obra, y que actualmente se trabaja a un 30 por ciento de la capacidad de los negocios, porque año con año las ventas bajan drásticamente, por lo que, insistió, esa industria está al borde de desaparecer.