POR : ANDRÉS TIMOTEO/ columnista
Si alguien deberá hacer hazañas, por no decir milagros, para el proceso electoral del 2017 que renovará los 212 a
Ayuntamientos son los llamados candidatos independientes cuya figura debe navegar entre dos corrientes enturbiadas. Para empezar será la primera vez que un ciudadano sin respaldo de un partido político participe en la disputa del poder municipal y por otro lado, la novedad de la figura quedó opacada por el descrédito, pues las candidaturas independientes fueron pervertidas por la fidelidad.
Dos cordobeses son de los principales culpables que los electores no confíen en quienes se asumen como abanderados de la sociedad civil: Juan Bueno Torio y Gerardo Buganza Salmerón, quienes en la elección pasada se prestaron al juego del innombrable y de su sucesor, para disfrazarse de abanderados “independientes” con la intención de robarle votos al candidato de la coalición formada por los partidos Acción Nacional (PAN) y de la Revolución Democrática (PRD).
Buganza, como se sabe, fue candidato a la Gubernatura por el PAN en el 2004, le robaron el triunfo, pero en lugar de defenderlo o guardar una posición digna, negoció con el innombrable, se convirtió en proveedor consentido del Gobierno Estatal y ya en el 2010 se soltó la cabellera, haciendo campaña abierta en favor de Duarte de Ochoa, quien lo incluyó en su Gabinete como secretario general de Gobierno, primero, y luego de Infraestructura y Obra Pública.
Por instrucciones del impresentable exgobernante que despacha en Barcelona, Buganza renunció en el 2015 al gabinete duartista y emprendió una promoción personal para convertirse en candidato “independiente” a la Gubernatura y hasta habló de ser la antítesis de la “mafia del poder”. Poco le duró la labia pues en la fidelidad se díeron cuenta que no levantaba en las encuestas y lo retiraron del proyecto. Como premio de consolación lo inscribieron en el primer lugar de la lista de candidatos plurinominales del Partido Verde Ecologista de México (PVEM) a la Diputación Local.
Así, lo “independiente” a Buganza le duró lo mismo que las intenciones aviesas de sus titiriteros y terminó siendo el candidato de uno de los partidos de la “mafia del poder” que tanto cacareó. Hoy es Legislador Local, otro cargo indignamente tomado. Y su veleta sigue moviéndose conforme al soplido de sus intereses, pues ahora dice que respaldará con todo al actual gobernante, su odiado enemigo. Vaya que el persignado Buganza le reza a Dios y al diablo.
Con el devaneo en su postulación como candidato “independiente”, Buganza también dañó la imagen pública de esa figura, lo mismo que hizo Bueno Torio, el segundo cordobés movido por la fidelidad como ariete contra Acción Nacional. Bueno Torio, también expanista –toda su vida política ha medrado de cargos públicos, sean en la Cámara de Diputados, el Senado o el Gobierno Federal- sí logró ser candidato “independiente”, pero no fue por respaldo ciudadano, sino porque desde el Gobierno Estatal lo ayudaron a conseguir las firmas necesarias para su registro ante el Organismo Público Local Electoral (OPLE).
Luego se supo que dichas rúbricas nunca fueron auténticas sino, según la leyenda urbana, habrían sido falsificadas y otras tomadas de los padrones de militantes priistas. También sobre Bueno pesa el señalamiento de haber recibido mucho dinero del Gobierno Estatal, tanto como pago personal por prestarse al juego como para costear su proselitismo. No hay que olvidar que en una charla con incondicionales en un restaurante de la Ciudad de México, el innombrable reveló que Bueno “se cotizó en euros” y con lo que le pagaron rescató financieramente su plaza comercial Andamar, en el puerto de Veracruz.
IMPRESENTABLES Y DISFRAZADOS
El pasado 15 de diciembre finalizó el plazo para quienes aspiran a ser candidatos independientes y en total se registraron 96 aspirantes que deberán acreditar los re quisitos para recibir la venía de las autoridades electorales –entre ellos, recolectar firmas de apoyo ciudadano que representen el 3 por ciento del padrón de electores en cada municipio y conformar un asociación civil acreditada ante el fisco-, de los cuales 77 son hombres y 19 mujeres, es decir, ni con supuesta independencia partidaria se cumple la paridad de género, pues sólo el 20 por ciento de los aspirantes son féminas.
Además, en la lista recibida por las autoridades electorales hay verdaderos impresentables, unos son ‘chapulines’ que han saltado de partido en partido y otros están ligados estrechamente al PRI, a la fidelidad y al panismo rojo. En el puerto de Veracruz se inscribió el exsíndico Hiram Barragán, ligado a la exalcaldesa Carolina Gudiño, una de las consentidas del innombrable. En Emiliano Zapata quiere ser candidato el excontralor Iván López Meza, embarrado en todo el cochinero financiero del duartismo.
Una perla es que el cordobés, Antonio Luna Andrade, pretende ser abanderado “independiente” por Xalapa, la capital del Estado, y no por Córdoba. Esto luego de que su Partido Antochista perdió el registro por no tener votación suficiente en el pasado proceso electoral. De esta forma, con un partido hechizo echado a la basura y siempre ligado al PRI, ahora Luna Andrade se cuelga el escapulario de independiente. No se cansa de vivir del presupuesto, pues el señor no va por el cargo edilicio, sino por el financiamiento público que recibirá.
Por cierto, Córdoba es uno de los municipios con más aspirantes a una candidatura independiente con 5 inscritos: Mauricio Iván Aguirre Marín, Edmundo Rodríguez Yaladaqui, Patricia Ramírez Antonio, Leonardo Palma Ameca y Fidel Martínez Hernández. El señor Palma Ameca es panista, quiere burlarse de la ciudadanía. Es la carta de Juan Bueno y del exdiputado Sergio Ortiz, incrustada en la modalidad de los “independientes”, mientras que Rodríguez Yaladaqui tiene una mini-organización civil que la integran él y dos compadres, y que sirvió para traficar con placas de taxi en el sexenio pasado.
Los restantes, ¿alguien los conoce? A su vez; por Atoyac se inscribió Héctor Zepeda Salas; por Cuitláhuac Tomás Eloy Rayón Ruiz y Susana Serrano Vallejo; y por Chocamán, José Luis Remigio Plata. La otra perla es el exalcalde de Amatlán de los Reyes, Hugo Granillo López, ligado directamente al PRI y con la fama de “meterle la mano al cajón” municipal, cuando fue Edil de ese mismo municipio, en el trienio 2008-2010.
Tan sólo en el último año de Gobierno, en el 2010, se le atribuye un robo a las finanzas del Ayuntamiento por 4 millones de pesos y como líder cañero de la zona se le involucra en un desfalco por 50 millones de pesos en el ingenio San Miguelito. Finísima persona que ahora intenta engañar a los ciudadanos con la etiqueta de “independiente”.
Otro que se cocina aparte es Enrique Romero Aquino, quien fue alcalde de Ciudad Mendoza (1995-1997) y diputado local por el Partido de la Revolución Democrática (PRD), y en el 2017 aspira volver a contender por el Ayuntamiento mendocino por el epíteto de “independiente”; cuando no sólo viene del Sol Azteca sino que en su época de Legislador se le vinculó con el priismo, y en especial con el Gobierno de Miguel Alemán Velasco.
No hay que olvidar que fue uno de los diputados de oposición que recibió carretadas de dinero para aprobar las iniciativas de Alemán Velasco. Incluso una de las camionetas de lujo que usaba en esa época fue bautizada como “La Constitución”; pues habría sido parte del pago que le dio el tricolor por no oponerse a la nueva Constitución del Estado que promulgó Alemán en su sexenio. Por si fuera poco, a Romero Aquino le instruyen un proceso de expulsión en el PRD, pues lo acusan de traicionar al partido y apoyar al tricolor en los comicios del pasado 5 de junio.
Junto a Romero Aquino, hay otros 19 militantes del Sol Azteca a los que también se les expulsaría, entre ellos el exsenador Elías Miguel Moreno Brizuela, y el exdiputado local Fredy Ayala González. Hace días, Romero pidió licencia temporal a su militancia perredista y fue para hacer el trámite ante el OPLE y solicitar su registro como “candidato independiente”. Vaya caradura.
Ese es el talante de muchos de los aspirantes a las alcaldías por la modalidad de “independientes”, aunque nadie debe asustarse mucho porque están tan ‘quemados’ que no llegarán ni a primera base. Es inverosímil ese pronóstico de que serán al menos 50 alcaldías ganadas por los candidatos independientes, no hay tal posibilidad porque la figura está pervertida y los inscritos serían participantes sulfurados de panismo y priismo, es decir, disfrazados e impresentables.
NAVIDAD
CONVULSA
“Nouvelles effroyables” (Noticias terribles) desde el llamado Viejo Continente, donde los vientos de guerra e incertidumbre aumentaron en las vísperas de la Navidad. Dos atentados terroristas que dejaron 13 personas muertas. En Ankara, Turquía, un extremista islámico asesinó a balazos al embajador ruso, Andréi Kárlov, al grito de “¡Allahu akbar!” (¡Alá es grande!) y recriminando la injerencia de la armada rusa en los bombardeos de Alepo, Siria; y en Alemania 12 personas murieron al ser arrolladas por un cambión de carga, un acto que hace recordar el atentado del 14 de julio en Niza, Francia, que dejó 80 fallecidos.
Además en Zurich, Suiza, un tiroteo en un oratorio musulmán dejó tres personas heridas de gravedad. El crimen del Embajador ruso no es menor y cimbra el contexto geopolítico mundial porque es sabido que Turquía y Rusia están en proceso de conformar un eje de influencia política, económica y militar, junto con China, que desafía la influencia americana en la mitad del planeta.
Por otro lado, el embate contra los asistentes al mercado navideño de Breitscheidplatz, en Berlín, tiene todas las características de un atentado terrorista y encendió nuevamente las alarmas en todo Europa, cuyos destinos de invierno están atiborrados de turistas. El 2016 fue un año terrible –al igual que el 2015- por el costo de vidas en ataques terroristas. Francia, Bélgica y Alemania, fueron tocadas por los soldados del Daech, la mayoría adheridos a la causa salafista que por su cuenta deciden escuchar el llamado para convertirse en kamikazes en nombre de la fe. Todo apunta a que la masacre aún no termina y los diez días que quedan del año serán de miedo y vigía
Por lo pronto, en Francia sonaron la sirenas y los mercados de navidad (marchés de Nöel) del País fueron puestos bajo vigilancia extrema por la policía militar, sobre todo aquellos que son famosos internacionalmente como los ubicados en Estrasburgo, Colmar, Nantes y el propio París ,que tiene mercadillos emblemáticos como los instalados en los Campos Elíseos, la explanada de Trocadero, frente a la Torre Eiffel, o el Gran Arco de La Defensa, donde se instala el o más grande de todo el continente. Así, la Navidad en Europa se avecina en un ambiente de miedo y convulsión.
