CDMX.- En medio de la polémica por sus altos ingresos de fin de año, 521 mil 294.1 pesos por cada diputado y 400 mil 35.4 pesos por cada senador, que implicaron una erogación mensual de 311 millones 851 mil 581.2 pesos, el Congreso de la Unión cerró el período ordinario más improductivo de este sexenio, al dejar dos mil 131 pendientes; es decir, 221.9% más que el año pasado.
Durante el período ordinario que concluyó, senadores y diputados federales aprobaron 351 asuntos, desecharon 38, atendieron tres y retiraron de proceso legislativo 41 más, para dejar pendientes un total de dos mil 131 iniciativas, propuestas con puntos de acuerdo y nombramientos.
De acuerdo a las estadísticas del Sistema de Información Legislativa, para un primer período de año legislativo, que corre del 1 de septiembre al 15 de diciembre de cada año, con excepción del año en que hay cambio de gobierno federal, que dura hasta el 31 de diciembre, el mayor nivel de productividad legislativa lo registraron el Senado y la Cámara de Diputados en 2012, cuando sólo dejaron 227 pendientes.
En los años 2013 y 2014, senadores y diputados fueron altamente productivos y fue cuando procesaron las Reformas Estructurales, tanto las emanadas por el extinto Pacto por México, como de las iniciativas presidenciales, ciudadanas y legislativas.
Las estadísticas realizadas por el Sistema de Información Legislativa (SIL), de la Secretaría de Gobernación, que da seguimiento a las actividades en las Cámaras del Congreso, dejan ver que entre septiembre y diciembre de 2012, el Congreso de la Unión dejó 227 pendientes; al siguiente año, en 2013, los pendientes sumaron 281 asuntos. Para 2014, cuando se concretó la mayor parte de la legislación secundaria relacionada con las reformas constitucionales estructurales, el Congreso de la Unión dejó un total de 316 pendientes. En 2015 fueron 662 pendientes. Así, el Congreso de la Unión concluyó la semana pasada el periodo ordinario más improductivo del actual sexenio.