Orizaba.- Un camino largo y lleno de obstáculos que, en muchas ocasiones, tiene como destino final la muerte. Así es como muchos migrantes centroamericanos describen su paso por el Estado, en su viaje hacia el vecino País del Norte, cuando van en busca del llamado Sueño Americano, montados en los “lomos” de La Bestia.
Sin duda alguna, los municipios de la zona Centro se han convertido en paso obligado para cientos de viajeros, quienes antes de poder llegar a Estados Unidos, tienen que atravesar el infierno que representa el ir “colgados” del tren para poder cumplir su sueño, y el de sus familias, quienes ansían un mejor futuro.
Los migrantes no sólo enfrentan las condiciones que sufren en su duro viaje hacia el País del Norte, ya que en muchas ocasiones son vistos como simple mercancía por el crimen organizado o algunas corporaciones policiales, por lo que muchos de ellos pierden la vida en el trayecto.
La “parada” más peligrosa
La colonia Modelo, ubicada en el municipio de Río Blanco, es uno de los puntos que mayor índice de muertes de migrantes representa, en su paso por el Estado.
En lo que va del 2016, se han registrado al menos ocho muertes de personas que han caído de los vagones de trenes.
Por desgracia, uno de cada cuatro no logra subir a los “lomos” de La Bestia y termina debajo de las ruedas, sufriendo en el menor de los casos la amputación de alguna extremidad, y en otros más la muerte tras ser despedazados y arrastrados sobre las vías.
Otras sucumben ante el sueño y las condiciones climáticas, lo que deriva en que estos caigan de los vagones y pierdan la vida al instante, siendo curiosamente, las personas originarias de Honduras las que tienen un mayor número de muertes por estos hechos.
Por esto y más, el viaje que realizan nuerstros hermanos centroamericanos es sin duda la mayor de las travesías que alguien puede emprender en busca de un mejor futuro, señalándose que la misma situación que sufren nuestro paisanos, estos últimos la padecen en mayor medida, aunque sin mermar sus deseos de triunfar.