YOKOHAMA.- Las distancias se han acortado, pero aún existen. América plantó un muy buen partido y compitió ante un Real Madrid bipolar, que por momentos parecía complicarse y por otros sólo sobrellevaba las acciones. Al final, un par de goles en las compensaciones de cada tiempo definieron el 2-0 a favor del cuadro español.
Las Águilas de La Volpe apelaron al orden, conscientes de las individualidades del rival, y aunque tuvieron opciones y mostraron solidez defensiva, el Real Madrid dio la impresión de sólo ir por ese error para después hacer un partido pensando en la final.
Aun sin Sergio Ramos, el rematador de cabeza que en los últimos segundos de sus más recientes juegos le dio al Madrid triunfos agónicos, el cuadro merengue mantuvo la costumbre de anotar en las compensaciones.
Así que de esta manera acabó el sueño del América, por dar una sorpresa en el Mundial de Clubes.
Ahora las Águilas disputarán el próximo domingo, a las 1:00 horas (tiempo del Centro de México), el partido por el tercer sitio de la justa mundialista ante el Atlético Nacional.