Córdoba.- Con la desaparición de las Juntas de Conciliación y Arbitraje, tanto locales como federales, se eliminarán los “ahijados” políticos y sobre todo el tiempo y desgaste económico que genera mantener largos juicios laborales. Además, se reducirá el poder sindical que afectaba a los trabajadores, sobre todo con las presiones político- electorales.
A decir del Presidente del Colegio de Licenciados en Derecho de Córdoba, A.C., la iniciativa de Ley General de Justicia Cívica, que presentó el presidente Enrique Peña Nieto, es favorable al considerar que los juicios tardan demasiado y económicamente son pesados para la Administración Pública, pues un laudo tarda hasta dos años en dictarse y las promociones meses en hacerlas.
Por ello, reconoció que actualmente las Juntas son inoperantes, pues no hay conciliaciones rápidas. La idea es que una vez que desaparezcan se focalice o centralice la impartición de justicia laboral por quien le toque resolver y ya no esté perdiendo tanto tiempo la conciliación.
“Es favorable su desaparición, se trata de una Reforma que ayudará a los juicios laborales, ya que se va a hacer una pronta y expedita justicia y se acabará con el control político que ahí se tiene, porque es común que en las Juntas Locales siempre se tenga un “ahijado” político y las juntas ya deben ser totalmente independientes o bien trasladarlas al Poder Judicial”.
Dijo que las Juntas de Conciliación perdieron el objetivo para el cual se crearon, ya que los representantes de los patrones y los trabajadores no cumplen con la responsabilidad de participar en los laudos.
