Zongolica.- En su selecto grupo de madres invitadas, no se notó la presencia de personas vestidas de bayeta, mucho menos mamás descalzas, tampoco aquellas que con petacas en mano vieron llegar el imponente convoy de camionetas que le siguen habitualmente al diputado.
Ahí, dentro del salón, una pantalla plana y regalos menores, conformaron las rifas del teatro montado para que el diputado federal hiciera su entrada triunfal a este distrito que le exige resultados.
Muchos priistas se preguntaron por qué no visitó la colonia Indeco para informar a las familias cómo marcha el proceso de las obras del Fonden o por qué no fue a las oficinas del PRI para programar la operación cicatriz, que gracias a su intromisión en el proceso interno, mantiene en vilo el triunfo del partido en la cabecera distrital el próximo 7 de julio.
La tranquilidad en Zongolica, como en cada visita, se vio entorpecida por la llegada de Tomás López Landero, que como en cada arribo, se limitó a recibir oficios que en muchas ocasiones, nunca responde ni cumple.
De la redacción
El Buen Tono