Córdoba.- Policontundido resultó un repartidor de pizzas, la tarde de este jueves, cuando la moto que manejaba se estrelló con un automóvil compacto, en el cruce de la avenida 13 y calle 34, del fraccionamiento Nuevo Córdoba; paramédicos atendieron al lesionado y lo enviaron a un hospital, mientras agentes de tránsito se encargaron de tomar conocimiento de los hechos.
Informes consultados señalan que el accidente se registró alrededor de las 16:15 horas de este jueves, cuando por la avenida 13, circulaba una motocicleta marca Honda-Cargo, modelo 2012, con placas G-03LD del Distrito Federal, propiedad y con logotipos de la pizzería “Pizza Hut”, misma que era manejada por el repartidor Antonio Guillermo Montalvo Velázquez, de 26 años.
Debido a la velocidad con que viajaba este repartidor de pizzas, debido a los tiempos de entrega de producto que deben de cubrir, no se detuvo al llegar al cruce con la calle 34, con preferencia de paso.
Como resultado de ello, se estrelló en el costado izquierdo de un automóvil marca Volkswagen-Sedán, color blanco y con placas de circulación YGJ-4462 del estado de Veracruz, y el cual era conducido por Bernardo Ricardo Solís Cortés, de 63 años.
Debido al impacto, el coche registró daños en la salpicadera trasera izquierda, así como en el costado del mismo lado, en tanto que el repartidor de pizzas salió proyectado metros adelante junto con la moto, y quedó tirado en el pavimento, donde resultó policontundido.
Testigos del accidente, alertaron a las corporaciones de emergencia, acudiendo al lugar paramédicos de la Cruz Roja, quienes le brindaron los primeros auxilios al afectado y lo remitieron a un hospital, donde quedó internado.
Marcelino Gómez Jiménez, perito de Tránsito del Estado, se apersonó en el área para tomar conocimiento de los hechos, y determinó que el motociclista no respetó la preferencia de paso que en ese lugar tiene la calle 34, provocando choque en ángulo y generando daños materiales por aproximadamente $7 mil en global.
Momentos después, los vehículos fueron retirados por personal de grúas y enviados al corralón, donde quedaron depositados hasta en tanto se realiza un convenio entre los propietarios, a través de una compañía aseguradora, para el pago de los daños ocasionados a ambas unidades.
Antonio Osorio
El Buen Tono
