Cd. Mendoza.- Una ola de pánico y psicosis provocó la balacera que se suscitó la mañana de ayer entre integrantes del crimen organizado y elementos de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), provocando el cierre de locales comerciales que se ubican en las inmediaciones del parque Hidalgo.
A pesar del sinnúmero de unidades policiales que resguardaban la zona, una multitud de padres de familia de la escuela primaria Josefa Ortiz, se volcaron desesperados a las instalaciones del inmueble, en donde pedían la entrega de sus hijos.
La situación se tornó aún más tensa, debido a que los delincuentes trataron de huir subiendo a los techos de varios locales del mercado Morelos, por lo que policías municipales que se sumaron al enfrentamiento, resguardaron la escuela.
Poco después, los alumnos fueron entregados a sus padres, quienes tuvieron que correr para resguardarse de cualquier situación de peligro en algunos negocios que permanecían abiertos, hasta que las calles fueron liberadas por fuerzas policiales estatales y locales.
Ante el enfrentamiento, trabajadores de la Clínica 4 del IMSS tuvieron que refugiarse adentro del centro médico, desde donde presenciaron el tiroteo, que duró cerca de media hora, hasta que uno de los delincuentes cayó abatido.
Horas después, centenares de locatarios, transeúntes y curiosos observaron como Policías Ministeriales y de Periciales realizaban el levantamiento del cadáver del delincuente abatido por las fuerzas estatales.